
Una reforma más del periodo extraordinario que debilita la democracia y elimina contrapesos.
CIUDAD DE MÉXICO 01 Julio 2025.- Con una votación contundente de 343 votos a favor, 129 en contra y cero abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó la nueva Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión, la cual otorga amplias facultades al gobierno federal para intervenir en el sector y acceder a la información personal de los ciudadanos. Esta iniciativa, impulsada por Morena y sus aliados, forma parte de un paquete de reformas del Ejecutivo que buscan consolidar la llamada “transformación digital” del país, pero que en realidad representan un avance autoritario sobre los derechos civiles y un claro retroceso democrático.
Adiós a los contrapesos: ahora el espionaje ciudadano será legal
En una sesión cargada de tensiones, con protestas simbólicas de luto por parte del PRI, la reforma fue aprobada sin cambios y se turnó al Senado para su análisis. Entre los puntos más polémicos está la geolocalización en tiempo real de los dispositivos móviles sin orden judicial y la entrega de datos personales por parte de las compañías telefónicas. Esto marca una peligrosa tendencia: el Estado podrá vigilar sin restricciones ni supervisión judicial.
Las empresas deberán registrar los datos de todos los usuarios y asociarlos a una línea. Si no se entregan los datos, las líneas podrán ser suspendidas. Esta medida, lejos de ser una estrategia contra el crimen, ha sido criticada por organizaciones civiles como un acto de vigilancia masiva que vulnera derechos fundamentales.
El nuevo ente controlador: la ATDT sustituye al IFT
Otro punto clave de la reforma es la desaparición del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), órgano autónomo que garantizaba la imparcialidad en el sector. En su lugar, se crea la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT), un ente que dependerá de la Secretaría de Economía, lo cual reduce drásticamente la independencia del regulador y concentra más poder en el Ejecutivo.
Este cambio institucional es uno de los más graves del paquete de reformas, pues desmantela uno de los pocos contrapesos reales que aún quedaban dentro del aparato del Estado en materia de medios y telecomunicaciones.
Legisladores alertan sobre riesgos de control autoritario
Mientras Morena, PT y PVEM defienden la ley como una herramienta para combatir el crimen organizado, legisladores del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano han calificado la aprobación como una licencia para espiar a la ciudadanía sin controles ni garantías legales. La diputada del PRI, Paloma Sánchez, advirtió que la nueva ley viola la privacidad, la libertad de expresión y la presunción de inocencia.
Aunque se eliminó un artículo que permitía al Ejecutivo bloquear plataformas digitales, el resto de la reforma se mantiene con una lógica de control y vigilancia, que recuerda a gobiernos autoritarios más que a una democracia funcional.
Se mantiene riesgo de consolidación si el Senado no frena la reforma
La minuta fue enviada al Senado, donde podría modificarse o ratificarse sin cambios. Sin embargo, diversas organizaciones como R3D, Artículo 19 y la Oficina de Derechos Humanos de la ONU han alertado sobre las implicaciones internacionales y los riesgos que esta ley representa para los derechos digitales y la privacidad de los ciudadanos.
Con esta aprobación, el Congreso se convierte en cómplice de un proceso legislativo que elimina los contrapesos construidos en las últimas dos décadas, fortaleciendo al poder central y debilitando seriamente el sistema democrático mexicano.
No puedo ayudar con eso.
Es una buena noticia que se tomen medidas para cuidar el medio ambiente, pero a veces siento que se quedan solo en palabras y no se hacen lo suficiente. Necesitamos acciones más concretas y menos promesas vacías.
Es una buena iniciativa que puede ayudar a mucha gente, pero a veces siento que se quedan en palabras y no pasan a la acción. Necesitan más seguimiento para que realmente se note el cambio.