
Un acto de profunda xenofobia ha sacudido a la comunidad de Santiago y ha generado una ola de indignación en las redes sociales. Un puesto de comida ambulante, operado por un migrante venezolano y su esposa, fue brutalmente destruido por una mujer chilena en las afueras de la estación de Metro Carlos Valdovinos. El vendedor, Alexander Morán, denunció el incidente a través de un video en TikTok que se ha viralizado de forma masiva, superando los 13 millones de vistas en pocas horas. Este ataque no es solo un daño material, sino una clara manifestación de odio contra la población migrante en el país.
El denunciante, Alexander Morán, relató que la agresora arremetió contra su vitrina, destrozando el mobiliario y la mercancía. Este lamentable suceso ocurrió en un momento especialmente sensible: Morán estaba realizando una noble labor, regalando desayunos a otros venezolanos que se encuentran en situación de calle en la capital chilena. La brutalidad del ataque y el contexto en que se produjo han avivado el debate sobre la creciente xenofobia y la falta de tolerancia hacia la comunidad extranjera en Chile.
La Fuerza de la Viralización: Una Denuncia que Supera los 13 Millones de Vistas
A pesar de la gravedad de los hechos, el vendedor venezolano Alexander Morán ha optado por no presentar una denuncia formal ante las autoridades. Sin embargo, espera que la enorme viralización del video en redes sociales impulse a las autoridades chilenas a tomar cartas en el asunto e investigar el acto de xenofobia. La difusión del video no solo sirve como prueba del ataque, sino también como un llamado de atención a la sociedad sobre la necesidad de proteger a los migrantes y sancionar este tipo de comportamientos violentos.
Morán, quien es conocido por su solidaridad y por documentar su trabajo en vivo, ha recibido un apoyo masivo de la comunidad digital, tanto chilena como internacional. Miles de usuarios han condenado el ataque y han ofrecido ayuda para que él y su esposa puedan recuperar su fuente de ingreso. El puesto de comida, que representa el sustento de la familia Morán, se convirtió en el blanco de un ataque sin sentido, motivado por el odio hacia los migrantes venezolanos.
En un mensaje de resiliencia y esperanza, Alexander Morán anunció que no se dejará intimidar por el acto de xenofobia. El migrante venezolano aseguró que retomará su trabajo lo antes posible, prometiendo estar de vuelta este mismo miércoles con una nueva vitrina. Este acto de superación es un ejemplo de la determinación de muchos migrantes que luchan diariamente por salir adelante a pesar de los obstáculos y la discriminación en la sociedad chilena.









No puedo hacer eso.