Una presunta boda infantil en Oaxaca ha generado gran polémica, luego de que se difundieran imágenes donde aparecen niños consumiendo bebidas alcohólicas durante la celebración. La ceremonia se llevó a cabo en San Juan Yosocani, una comunidad del municipio de San Lorenzo, en la región de la Costa oaxaqueña.
En redes sociales se compartieron fotografías y videos del evento en el que, aparentemente, dos adolescentes llamados Jackeline y Julio César fueron casados bajo los usos y costumbres de la comunidad. La joven aparece vestida de blanco, rodeada por familiares y amigos, mientras se desarrollaban diversos rituales tradicionales.
Lo que más llamó la atención fue que, durante el conocido “baile de la calabaza”, se alentó a varios niños a consumir cerveza como parte del protocolo festivo. Este baile consiste en que los asistentes realicen una coreografía frente a los novios, le coloquen un calcetín al novio y, como recompensa, se les entrega una bebida que deben consumir de inmediato, incluso si son menores.
En uno de los videos que se viralizaron, se escucha a un hombre decir entre risas: “No me vaya a subir al Facebook, van a decir que le estamos dando alcohol a los pequeños y ellos no saben de eso”. A pesar de la gravedad del asunto, hasta el momento ninguna autoridad del DIF ni del gobierno estatal se ha pronunciado oficialmente.
En Oaxaca, el matrimonio infantil es una práctica que persiste en zonas rurales, a pesar de que la ley prohíbe expresamente estas uniones. Según el artículo 147 del Código Civil estatal, ambos contrayentes deben haber cumplido 18 años, sin excepción. Sin embargo, en comunidades con alta marginación como San Lorenzo, estas normas suelen ignorarse.
La situación se agrava con el consumo de alcohol entre menores, un problema visible en varias regiones del estado. De acuerdo con la ENCODAT 2016-2017, en Oaxaca el consumo consuet
Me parece genial que se hable de este tema, ya que es algo que nos afecta a todos. Sin embargo, creo que se debería dar más información sobre las soluciones o acciones que se están tomando. A veces solo se habla del problema y eso puede dejar a la gente un poco desanimada.
Es bueno ver que se están tomando medidas para mejorar la situación, pero a veces siento que las promesas se quedan en palabras y no se reflejan en acciones concretas. Hay que esperar que realmente se cumplan y no se olviden.
La verdad es que es bueno ver que se están tomando medidas para mejorar la situación. Sin embargo, a veces siento que se hacen anuncios grandiosos, pero luego no se ven resultados claros. Ojalá que esta vez sí se cumplan las promesas y se note un cambio real.