
Por Daniel Zovatto
Esta es la noticia del mayor rompimiento en Estados Unidos: pareciera que se acabó el amor entre Trump y Musk.
Trump y Musk consuman su ruptura con ataques cruzados:
“Sin mí, habría perdido las elecciones”, dijo Musk.
“Estoy muy decepcionado y sorprendido”, dice el presidente de EE.UU. sobre las críticas del magnate a su ley fiscal.
Trump se dijo “muy decepcionado y sorprendido” con los reproches de su antiguo aliado a la ley fiscal por cuya aprobación en el Congreso está presionando la Casa Blanca.
El hombre más rico del mundo, preocupado por el aumento en la deuda que traerá esa norma −bautizada como la “ley grande y hermosa”− la calificó el martes como ”una abominación repugnante”.
“Elon y yo teníamos una excelente relación”, añadió Trump este jueves a preguntas de los reporteros. “Ahora ya no estoy tan seguro de eso”.
El presidente de Estados Unidos también contó que Musk “conocía la ley” y que “no tenía ningún problema con ella”. Acusó al magnate de cambiar de idea cuando vio que sus negocios, en especial, Tesla, se iban a ver perjudicados con la nueva redacción de la norma, de más de mil páginas.
En directo, el empresario de origen sudafricano, que la semana pasada se despidió de su puesto al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental tras 130 días en los que sembró el caos en la Administración con sus recortes, contestó a su antiguo jefe en X, la red social de la que también es propietario. “Eso es mentira”, escribió Musk. “Ese proyecto de ley nunca me lo mostraron, y lo aprobaron con nocturnidad, ¡tan rápido que casi nadie en el Congreso pudo siquiera leerlo!“.
Veamos qué noticias trae el próximo capítulo de esta relación que del amor ha pasado rápidamente a los reproches como ocurre en nuestras mejores telenovelas.
Es curioso cómo estas relaciones entre figuras públicas pueden cambiar tan rápido. Al principio todo parece color de rosa y de repente ya están lanzándose dardos. Es un buen recordatorio de que no todo lo que brilla es oro y que a veces las alianzas son más frágiles de lo que pensamos.
Es curioso cómo a veces las relaciones entre personas influyentes pueden cambiar tan rápido. De ser aliados a tener reproches parece un guion de serie. Al final, los que seguimos esto solo podemos esperar que se resuelva pronto, porque el drama no ayuda a nadie.
Es increíble cómo dos personas tan influyentes pueden pasar de ser aliados a pelearse en un abrir y cerrar de ojos. A veces parece que todo es un show y lo que menos importa es el fondo de las cosas.