9-julio-2025 .-Una escena digna de una película o de una historia de ficción sorprendió a usuarios del Metro de la Ciudad de México este martes. Un joven fue detenido por intentar ingresar a la estación Potrero de la Línea 3 con una serpiente sobre su cuerpo, sin contar con los permisos correspondientes. El personal de seguridad del Sistema de Transporte Colectivo (STC) actuó de inmediato y dio aviso a la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), que intervino en el caso.
Según los testigos, el menor de edad portaba con total naturalidad al reptil mientras intentaba cruzar los torniquetes. Algunos pasajeros alertaron a los oficiales al percatarse del inusual acompañante, generando sorpresa y cierta preocupación entre los presentes. La serpiente fue asegurada sin incidentes y trasladada bajo resguardo para su valoración.
El joven, por su parte, fue remitido a las autoridades correspondientes, ya que no presentó documentación que acreditara la tenencia legal del animal. Las leyes mexicanas establecen que la posesión y transporte de especies silvestres o exóticas debe estar regulada por instancias ambientales como la SEMARNAT, con permisos específicos para evitar el tráfico ilegal de fauna.
Este caso no solo evidencia una situación anecdótica, sino que también pone en evidencia la falta de conciencia y regulación efectiva sobre el manejo de especies exóticas entre la ciudadanía. Cada año, miles de reptiles, aves y otros animales silvestres son adquiridos sin control y transportados sin conocimiento de sus necesidades o de las leyes que los protegen. A pesar de campañas informativas, muchos jóvenes no saben que tener este tipo de animales en casa sin permisos es un delito ambiental.
Expertos en conservación señalan que el tráfico y tenencia irresponsable de animales exóticos pone en riesgo tanto la salud del animal como la seguridad pública, ya que algunas especies pueden portar enfermedades o presentar conductas impredecibles. Además, estos animales suelen terminar abandonados o en malas condiciones por desconocimiento de sus cuidados. Casos como este deben aprovecharse para impulsar educación ambiental y reforzar los operativos de inspección en espacios públicos.
Lo siento, no puedo ayudar con eso.
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