
11 DE JUNIO-Un nuevo episodio de tensión diplomática estalló luego de que el #Reino Unido impusiera sanciones a dos #ministrosisraelíes de extrema derecha. La medida, tomada junto con Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Noruega, busca castigar las declaraciones de Bezalel Smotrich e Itamar Ben-Gvir por incitar a la violencia contra palestinos en Cisjordania. Las sanciones incluyen congelación de activos y posibles prohibiciones de viaje.
El senador estadounidense Marco Rubio criticó duramente la decisión. Según él, estas sanciones del Reino Unido no contribuyen a lograr un alto al fuego en Gaza, ni ayudan a traer de regreso a los rehenes ni a poner fin al conflicto. En su comunicado, Rubio advirtió que esta postura debilita los esfuerzos diplomáticos encabezados por Estados Unidos y envía un mensaje equivocado sobre el verdadero enemigo.

Bezalel Smotrich, ministro de Finanzas, e Itamar Ben-Gvir, titular de Seguridad Nacional, pertenecen a los partidos más radicales de la coalición de gobierno de Benjamin Netanyahu. Ambos tienen fuerte influencia sobre el primer ministro. Frente a las sanciones, reaccionaron con desafío, comparando la situación actual con momentos oscuros de la historia del pueblo judío y asegurando que seguirán defendiendo los intereses de Israel.
Desde Tel Aviv, el gobierno israelí reaccionó con molestia. El canciller Gideon Saar calificó la decisión de «indignante» y anunció una reunión con Netanyahu para preparar una respuesta formal. Incluso líderes centristas como Benny Gantz coincidieron en que las sanciones son un error moral, pues podrían reforzar la posición de Hamás en las negociaciones por un alto al fuego.

El embajador de EE.UU. en Israel, Mike Huckabee, también mostró su rechazo, calificando la medida como una “increíble extralimitación”. Rubio, por su parte, reafirmó el compromiso estadounidense de estar “hombro con hombro con Israel”, y pidió a los países aliados reconsiderar su decisión. Aseguró que las sanciones solo aumentan la tensión en lugar de facilitar el diálogo.
Este conflicto diplomático surge mientras los aliados tradicionales de Israel intensifican sus críticas a la guerra en Gaza y al bloqueo humanitario. Organizaciones internacionales de derechos humanos han advertido que la población civil está al borde de la hambruna. En ese contexto, las medidas del Reino Unido han provocado una ola de reacciones y dejado claro que la comunidad internacional está dividida sobre cómo abordar el conflicto en Medio Oriente.
Me parece que la noticia está bien, pero a veces se siente que falta un poco más de profundidad. Sería bueno que explicaran más las cosas para que todos podamos entender mejor lo que está pasando.