
Este jueves 10 de abril, #Lima y #Callao amanecieron sin el movimiento habitual de sus vehículos de transporte público debido al #paro de #transportistas convocado por diversos gremios. La razón: los constantes asesinatos de choferes en diferentes partes del país. Los dirigentes #MiguelPalomino y #MartínValeriano advirtieron que, si no reciben una solución concreta, están listos para elevar la medida a un paro #nacional indefinido que incluiría a todas las modalidades de transporte.
“Si nos siguen matando después del paro de transporte, nos vamos a un paro nacional”, declaró Palomino, visiblemente afectado por la falta de acción frente a la violencia. La medida podría ampliarse si el gobierno no garantiza condiciones mínimas de seguridad. Las amenazas y asesinatos se han vuelto un problema cotidiano para quienes trabajan al volante, afectando su derecho a trabajar con tranquilidad.
Transportistas exigen respuestas reales del Congreso

Los gremios se reunieron desde temprano para marchar hacia el Congreso de la República. Su exigencia es clara: protección real y medidas urgentes. Denuncian que, aunque en algunas ocasiones se han reunido con autoridades, no han obtenido respuestas efectivas. Incluso criticaron la presencia del Ejército en lugares como el Metropolitano y el Metro de Lima, señalando que no atacan la raíz del problema.
Además, los dirigentes hicieron un llamado a la unidad nacional del rubro, destacando que este no es un problema solo de Lima, sino de todo el Perú. Indicaron que están dispuestos a paralizar el transporte urbano, interprovincial, de carga, colectivos y hasta mototaxis. “Y si tiene que ser indefinido, nos vamos”, aseguraron ante medios locales
Por su parte, el premier Gustavo Adriánzen declaró que sí hay resultados en la lucha contra la delincuencia, pero reconoció que las amenazas a los transportistas se han intensificado. En entrevista con RPP Noticias, aseguró que la situación está siendo enfrentada dentro de las capacidades del Ejecutivo. Sin embargo, muchos consideran insuficiente la reacción del gobierno ante la grave crisis de seguridad.
Adriánzen también señaló que muchas víctimas no denuncian por miedo. Sin embargo, pidió a los choferes que compartan los mensajes de amenaza con la Policía Nacional para poder hacer seguimiento. Para los gremios de transporte, esta solicitud llega tarde, cuando ya han perdido compañeros en las rutas.
El transporte urbano se detuvo casi por completo

Según los dirigentes, entre el 98% y el 100% de las empresas de transporte en Lima y Callao dejaron de operar durante este paro de transportistas. Algunas empresas que acataron la medida fueron: Etul4 SA, ET 10A, Consorcio Roma, La 50, ET Santa Catalina, ET Las Flores “57”, Etusa “52”, ETOcho SA, entre muchas otras. El paro tuvo un impacto directo en los distritos más grandes de la capital como San Juan de Lurigancho, Ate, Comas y Villa María del Triunfo.
Los usuarios se vieron obligados a buscar otras opciones de movilidad, en medio de una ciudad con tensión y presencia militar. Aun así, los transportistas consideran que la paralización fue un éxito, y esperan que el Congreso no solo los escuche, sino que actúe de inmediato para frenar la violencia.
Es genial ver que se están tomando medidas para cuidar el medio ambiente, pero a veces siento que se quedan en promesas y no en acciones concretas. Necesitamos más resultados y menos palabras.