22 DE ABRIL DEL 2025.- Kanye West volvió a encender las redes sociales, pero esta vez no fue por su estilo, su música o sus opiniones políticas. El rapero sorprendió al mundo con una confesión impactante en su nueva canción Cousins, donde narra una relación incestuosa con su primo cuando ambos eran menores de edad. La letra ha generado todo tipo de reacciones, desde la preocupación por su salud mental hasta la sospecha de que todo podría tratarse de una estrategia de marketing o una distorsión de la realidad.
En la canción, Kanye West relata cómo su infancia estuvo marcada por momentos turbios con su primo, incluyendo el consumo de revistas para adultos y la recreación de escenas que ambos no comprendían del todo. “Me llamo Ye y le chupé la p*lla a mi primo hasta los 14”, dice en uno de los versos más controversiales. Aunque algunos aseguran que se trata de una metáfora para hablar del trauma, otros lo toman como una confesión literal que ha puesto en duda su estado emocional.
Cousins: una mezcla de dolor, recuerdos y controversia
El video musical de Cousins no se queda atrás en cuanto a intensidad. Las imágenes son caseras, sin una narrativa clara, pero combinan escenas de violencia, sexualidad y una sensación constante de incomodidad. Kanye también menciona que su primo, el mismo con quien vivió estos episodios, está actualmente en prisión por homicidio, lo que añade un peso aún mayor a la historia que se cuenta en la canción. Para muchos fans, Cousins parece ser una especie de catarsis donde el artista trata de procesar viejos fantasmas.
Este no es el primer momento en que Kanye West habla sobre su primo. En 2018, durante una entrevista, ya había manifestado su cariño hacia él, a pesar de su pasado criminal. Esa relación compleja y llena de contrastes ahora cobra nueva relevancia tras el lanzamiento de este polémico tema. Lo que antes parecía una historia familiar más, hoy se convierte en el centro de una discusión pública con tintes psicológicos y sociales.
Bianca Censori reacciona de forma sutil a la polémica
Mientras la conversación sobre Cousins se apodera de redes sociales y medios, la esposa de Kanye, Bianca Censori, lanzó un mensaje breve pero contundente: “No todas las cicatrices deben ser expuestas al mundo”. La frase, publicada en sus redes, ha sido interpretada como una respuesta directa al contenido de la canción. Muchos consideran que con esas palabras intenta proteger la intimidad de su esposo o bien expresar su desaprobación sobre cómo decidió ventilar su pasado.
La frase de Bianca ha generado un nuevo foco de atención, especialmente entre quienes consideran que Kanye está utilizando su historia personal de forma irresponsable. La pregunta ahora es si este tipo de revelaciones realmente ayudan a sanar heridas del pasado o simplemente alimentan el morbo y el escándalo. Sea como sea, la canción ya se convirtió en uno de los temas más comentados del momento, no por su ritmo, sino por lo que se atrevió a contar.
Kanye West, la línea entre lo personal y lo público
Lo que está claro es que Kanye West ha cruzado una línea muy fina entre lo íntimo y lo público. Aunque el arte ha sido históricamente una vía para expresar traumas, lo explícito de sus palabras ha dejado a muchos en shock. Algunos terapeutas y especialistas en salud mental incluso han advertido sobre el posible impacto que este tipo de confesiones puede tener en los oyentes más jóvenes o vulnerables.
Por ahora, Kanye no ha dado declaraciones adicionales sobre Cousins. No se sabe si lanzará un comunicado, una entrevista o simplemente dejará que el tema se explique por sí solo. Mientras tanto, la conversación en línea sigue creciendo y el debate sobre hasta dónde puede llegar un artista para contar su verdad sigue más vivo que nunca.
Es genial que se hable de este tema, porque es algo que nos afecta a todos y es importante que la gente esté informada. Sin embargo, a veces siento que se le da más atención a los problemas que a las soluciones. Sería bueno que se enfocaran más en lo que se puede hacer para mejorar la situación, en vez de solo señalar lo malo.