El peso mexicano se encamina al cierre semanal de este viernes 28 de noviembre de 2025 con una ligera tendencia al alza frente al dólar estadounidense, un movimiento que se da en un contexto de bajos volúmenes de negociación en los mercados internacionales. El tipo de cambio interbancario inició sus operaciones en $18.34 pesos mexicanos por billete verde, aunque los datos de Bloomberg mostraron una mínima pérdida inicial del 0.07 por ciento. No obstante, a lo largo de la mañana, el peso mexicano logró revertir esta ligera caída, reafirmando su resiliencia en un mercado global con liquidez reducida.
Baja Liquidez por el Feriado en Estados Unidos
La estabilidad y el leve avance del peso mexicano se producen en un escenario marcado por la celebración del Día de Acción de Gracias en Estados Unidos, un feriado que reduce significativamente la liquidez y las referencias operativas en los mercados globales. Ayer, la moneda local ya había cotizado estable debido a este factor. La ausencia de grandes movimientos en el mercado estadounidense implica que las operaciones se realizan con cautela, lo que limita la volatilidad de la divisa mexicana y su tipo de cambio.
La poca actividad en el mercado de divisas estadounidense permite que los factores internos de México y las expectativas macroeconómicas globales tengan una influencia más marcada sobre el precio del peso. A pesar de la calma general, la moneda doméstica ha mostrado una ligera fortaleza que es atribuida a factores externos que benefician indirectamente al peso mexicano y a su tipo de cambio.
Expectativas de Recortes de Tasas Impulsan la Divisa Mexicana
El peso mexicano se apreciaba levemente hoy, cotizando en $18.33 por dólar, lo que representa un alza del 0.12 por ciento frente al precio de referencia del jueves, según LSEG. El principal motor detrás de esta apreciación son las crecientes expectativas en el mercado global sobre futuros recortes de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos. Una Fed menos restrictiva tiende a debilitar el dólar y a impulsar a monedas de mercados emergentes como el peso mexicano.
Cuando las tasas de interés en EE. UU. disminuyen, los inversores buscan mejores rendimientos en otros países. México, con tasas de interés relativamente altas, se convierte en un destino atractivo para el llamado carry trade, donde los inversores se benefician de la diferencia de tasas, fortaleciendo la demanda y el precio del peso. Este contexto de política monetaria global favorable está respaldando la ligera subida de la divisa mexicana.
La Resiliencia del Sector Exportador y Remesas
Es importante añadir que, más allá de la política monetaria, la resiliencia económica de México también contribuye a la estabilidad del peso mexicano y su favorable tipo de cambio en el largo plazo. El fuerte desempeño del sector exportador mexicano, impulsado por la tendencia del nearshoring (reubicación de cadenas de suministro más cerca de EE. UU.), genera un flujo constante de dólares hacia el país, lo que naturalmente fortalece a la divisa mexicana. Además, el flujo récord de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero sigue siendo una fuente importante de ingresos en dólares, actuando como un amortiguador clave que sostiene el precio del peso y su valor en el mercado de divisas.
La jornada de hoy refleja cómo el peso mexicano ha logrado consolidar una posición relativamente fuerte en el mercado, manteniendo las ganancias obtenidas durante las últimas semanas, a pesar de las fluctuaciones diarias. La cotización cercana a los $18.30 pesos por dólar indica una tendencia de relativa estabilidad, que es monitoreada de cerca por importadores y exportadores que dependen de la estabilidad del tipo de cambio.
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