8 DE SEPTIEMBRE DEL 2025- INTERNACIONAL. En una iniciativa innovadora que aborda dos de los problemas más apremiantes de la India, la contaminación por plástico y el hambre, las «cafeterías de basura» están ganando terreno. La BBC ha visitado Ambikapur, una ciudad en el estado de Chhattisgarh, donde el concepto ha florecido con un éxito notable. Aquí, las personas de bajos ingresos y los recolectores de desechos pueden intercambiar residuos plásticos por una comida completa. Un kilo de residuos equivale a un plato de comida, mientras que medio kilo se puede canjear por un desayuno caliente. El lema de estas cafeterías es simple pero poderoso: «cuanto más residuos, mejor el sabor», y su impacto en la comunidad es profundo.
El modelo, financiado por la Corporación Municipal de Ambikapur (AMC), tiene como objetivo principal incentivar a la población, especialmente a aquellos en situación de calle, a limpiar las calles y vertederos de la ciudad. Como Rashmi Mondal, quien solía vender residuos plásticos a chatarreros por unos centavos, ahora puede alimentar a su familia a cambio de la basura plástica que recoge, lo que ha marcado una diferencia significativa en su vida. Este sistema no solo llena estómagos vacíos, sino que también contribuye a limpiar el medio ambiente y ha ayudado a la ciudad a ser reconocida como una de las más limpias de la India.

Ambikapur: Un modelo de “cero residuos”
La ciudad de Ambikapur ha adoptado un ambicioso sistema de «cero residuos», transformando un antiguo vertedero de 6.5 hectáreas en un parque. La clave de este éxito radica en la implementación de un sistema descentralizado de manejo de residuos. El plástico reciclable que se recoge en las cafeterías se envía a centros locales donde las «hermanas de la limpieza» —un grupo de 480 mujeres— clasifican los desechos en más de 60 categorías. El plástico se transforma en gránulos para la construcción de carreteras o se vende a recicladores, generando ingresos para el gobierno local. Este enfoque no solo resuelve el problema de los vertederos, sino que también crea empleos dignos para mujeres de la comunidad.
La efectividad del «modelo Ambikapur» ha sido tal que ha sido replicado en 48 distritos del estado de Chhattisgarh, demostrando ser viable tanto operativa como financieramente. Sin embargo, a pesar de su éxito, la iniciativa enfrenta desafíos, como la falta de protección higiénica para los recolectores de basura, quienes se exponen a riesgos sanitarios. Además, el modelo no aborda la sobreproducción de plástico ni la falta de una separación de residuos adecuada en los hogares.

La iniciativa de las cafeterías de basura ha trascendido las fronteras de Ambikapur. Otros estados de la India, como Bengala Occidental, Telangana y Karnataka, han lanzado programas similares, intercambiando residuos plásticos por comidas o productos de higiene personal. A pesar de los éxitos, la implementación no ha sido fácil en todas partes. En Delhi, por ejemplo, las operaciones de estas cafeterías se han reducido debido a la falta de conciencia pública y de infraestructura de reciclaje. Este contraste resalta que el éxito de estos programas depende de un apoyo comunitario e institucional robusto.
El modelo de Ambikapur ha demostrado ser un «buen comienzo» para crear conciencia sobre el problema de la basura plástica y la importancia de las soluciones locales. Sin embargo, como señala la investigadora Minal Pathak, se trata de una solución superficial que no aborda las causas profundas del problema, como la sobreproducción de plástico y la falta de regulación. Para un cambio duradero, se necesitan «cambios más profundos» que complementen estos esfuerzos a pequeña escala. A pesar de sus limitaciones, estas cafeterías son un poderoso ejemplo de cómo la innovación social puede tener un impacto positivo en la vida de las personas y en el medio ambiente.
