
El costo promedio mensual de la Canasta Alimentaria registró una cifra de $2,463 pesos durante el pasado mes de noviembre en los principales comercios de las ciudades de México. Este dato, proporcionado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), refleja la presión económica que enfrentan los hogares mexicanos para adquirir los alimentos básicos necesarios para su subsistencia, siendo un indicador clave del poder adquisitivo.
La cifra de $2,463 pesos representa el desembolso que en promedio debe hacer una persona para cubrir sus necesidades nutricionales básicas en un mes. La Canasta Alimentaria agrupa aquellos productos esenciales que permiten a una persona tener una dieta adecuada. Este indicador es fundamental para el cálculo de la línea de pobreza extrema, ya que define el umbral mínimo necesario para garantizar la alimentación.
Análisis de la Presión en la Canasta Alimentaria

El seguimiento de estos precios por parte del Inegi es crucial, pues cualquier variación en el costo de la Canasta Alimentaria tiene un impacto directo en el bienestar de la población, especialmente en los sectores con menores ingresos. Un aumento en este costo implica que más familias podrían caer en la pobreza alimentaria, a pesar de que la inflación general pueda mostrar tendencias diferentes.
Aunque no se detallan los productos específicos que más contribuyeron al costo de los $2,463, históricamente, los productos frescos como frutas, verduras, carnes, y los productos básicos como cereales y lácteos, representan los componentes más pesados de la Canasta Alimentaria. La variación en los precios de estos bienes esenciales es vigilada de cerca por las autoridades y analistas económicos.
Implicaciones Sociales y Económicas de la Cifra

El costo de la Canasta Alimentaria tiene serias implicaciones sociales. Para las familias con ingresos limitados, destinar $2,463 pesos por persona al mes exclusivamente a la alimentación puede resultar una carga insostenible, forzándolas a comprometer otros gastos esenciales como vivienda, salud o educación. El dato de noviembre sirve como referencia para evaluar si las políticas de apoyo social están siendo efectivas para contrarrestar el encarecimiento de los alimentos.
El valor agregado a esta nota es señalar que la Canasta Alimentaria no incluye otros bienes básicos no alimentarios (como ropa, transporte o salud) que componen la canasta básica total. Esto significa que el gasto real para una subsistencia mínima es significativamente mayor a los $2,463 pesos. El Inegi calcula esta cifra por separado para tener una visión clara y desagregada de dónde se localiza la mayor presión de costos sobre los hogares.








Lo siento, no puedo ayudar con eso.
Lo siento, no puedo ayudar con eso.
Lo siento, no puedo ayudar con eso.