
11 de Diciembre del 2025.- La Fiscalía General del Estado de Quintana Roo ha logrado un avance significativo en la lucha contra los delitos que afectan la tranquilidad de los comerciantes y habitantes del municipio de Solidaridad. Tras una ardua labor de investigación y litigio, la institución informó que consiguió que un Juez de Control dictara el auto de vinculación a proceso en contra de un individuo identificado como Alejandro “N”. Este sujeto enfrenta cargos serios por su probable participación en el delito de extorsión en Playa del Carmen, específicamente en su modalidad agravada, lo cual representa un golpe a las estructuras delictivas que operan en la zona turística.
De acuerdo con los detalles revelados en la carpeta de investigación, el calvario para la víctima, cuya identidad ha sido reservada por razones de seguridad, comenzó desde el mes de julio del presente año. El imputado habría utilizado diversos canales de comunicación para intimidar al afectado, incluyendo mensajes a través de redes sociales, llamadas telefónicas constantes y, lo más alarmante, presentaciones físicas en el lugar de trabajo o domicilio de la víctima. Estas acciones forman parte del modus operandi habitual de la extorsión en Playa del Carmen, buscando generar pánico inmediato para someter a los ciudadanos.
Amenazas y cobro de cuotas
El objetivo principal de estas intimidaciones era el cobro ilegal del llamado «derecho de piso», una práctica que las autoridades buscan erradicar por completo. Según las indagatorias, Alejandro “N” exigía el pago de una cantidad aproximada de 30 mil pesos semanales a cambio de supuesta protección y de permitir trabajar a la víctima. Las amenazas no se limitaban a la exigencia económica, sino que escalaron a advertencias directas de privar de la vida al afectado si no cumplía con los pagos, elevando el nivel de riesgo y la gravedad de este caso de extorsión en Playa del Carmen.
La situación se tornó aún más crítica meses después del inicio de las amenazas, cuando la intimidación fue reforzada por la aparición de un segundo individuo. Este cómplice, cuya identidad también es investigada, acudió para reiterar las exigencias económicas y, como método de presión psicológica adicional, dejó una bala en el sitio. Este acto simbólico de violencia buscaba quebrar la voluntad de la víctima y acelerar el pago de la cuota, demostrando la coordinación con la que operan quienes cometen extorsión en Playa del Carmen.
Afortunadamente, la víctima decidió romper el silencio y presentó la denuncia formal ante las autoridades correspondientes. Derivado de esta acción valiente, la representación social integró la carpeta de investigación, reuniendo todos los elementos jurídicos, testimonios y pruebas necesarias para sustentar el caso. Con la evidencia en mano, la Fiscalía solicitó y obtuvo de un Juez de Control la orden de aprehensión en contra de Alejandro “N”, la cual fue ejecutada exitosamente por agentes de investigación en las calles del fraccionamiento Misión Villamar, en este municipio, frenando así la extorsión en Playa del Carmen cometida por este sujeto.
Proceso judicial y prisión
Una vez detenido, se llevó a cabo la audiencia de continuación por cumplimiento del mandamiento judicial, donde la Fiscalía Especializada en Combate a Delitos de Secuestro y Extorsión tomó el protagonismo. Durante la sesión, los fiscales presentaron datos de prueba contundentes que vinculaban directamente al detenido con los hechos delictivos denunciados. Tras un debate legal entre la defensa y la parte acusadora, el órgano jurisdiccional encontró méritos suficientes para procesar al imputado, validando la solidez de la investigación sobre este caso de extorsión en Playa del Carmen.
Finalmente, el Juez de Control dictó el auto de vinculación a proceso en contra de Alejandro “N” por su probable participación en el delito de extorsión agravada. Además, debido a la naturaleza violenta del delito y el riesgo que representa para la víctima y la sociedad, se le impuso la medida cautelar de prisión preventiva. Esto significa que el acusado permanecerá recluido en el centro penitenciario por todo el tiempo que dure el proceso judicial, garantizando así que no evada la justicia y enviando un mensaje claro contra la extorsión en Playa del Carmen.








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