Según la ciencia hacer un paseo por el bosque nos relaja, nos llena de energía y nos oxigena. En ese sentido, el Parque Nacional de La Marquesa, en la alcaldía Cuajimalpa de Morelos de la CDMX es quizá el mejor sitio para escapar. Por eso, preparen provisiones para el picnic perfecto en La Marquesa.
Aunque parte de este Parque Nacional también está en el Estado de México, este pedazo de bosque es el más cercano y el más hermoso que tenemos a la mano.
Ahí nos veremos rodeados de la vegetación entre sus grandes árboles, sus flores y plantas, el canto de las aves y muy buena gastronomía.
El Parque Nacional Insurgente Miguel Hidalgo y Costilla —o La Marquesa— es un verdadero paraíso y no lo podemos dejar fuera de nuestros planes de sábado o domingo.
Pasar un día rodeados de bosque
La Marquesa se ubica en la Sierra del Ajusco o Sierra de las Cruces sobre la carretera México-Toluca, a una hora de la CDMX. El parque está integrado por cinco valles diferentes: del Silencio, de las Monjas, de la Amistad, del Conejo y de Salazar y ocupa un área de mil 760 hectáreas.
Pasar por lo menos un día al aire libre resulta indispensable para todos. No hay como poder acercarse a la naturaleza, despejar nuestros pensamientos y recibir algo de inspiración. El bosque siempre tiene algo qué decirnos.
¿Qué hacer en este Parque Nacional?
La Marquesa fue declarado Parque Nacional por Decreto Presidencial el 9 de septiembre de 1936, durante el gobierno de Lázaro Cárdenas. Es un área natural protegida y sus suelos son de origen volcánico. Está a una altura de 2700 metros sobre el nivel del mar y en él vamos a encontrar magníficos miradores naturales. Desde sus zonas más elevadas, que son las Peñas de Barrón, se pueden contemplar el Valle de Toluca y el volcán Xinantécatl (el Nevado de Toluca).
El senderismo es una de las actividades más comunes del lugar. Cualquiera de los caminos de este bosque nos va a llevar a descubrir un lugar increíble. Lagunas para pasear en lancha y practicar la pesca, manantiales, peñas para escalar y hasta una que otra zona arqueológica como Tepalcatitla, Tlalcozpa, El Teponaztle o los restos de un adoratorio en la cima del monte Tláloc.
También se puede recorrer la zona a caballo. Hay pistas de carreras para minimotos y go-karts, se puede jugar al gotcha o también podemos visitar el criadero de peces “Francisco Zarco”, conocido como “Las Truchas”. Y no faltan los asadores, las mesas, bancas y palapas para realizar nuestro picnic.
Y por si no vamos preparados, podemos dar una vuelta por su zona de restaurantes con gran variedad de ricos antojitos mexicanos. La trucha es un platillo tradicional del lugar y es muy recomendable.
Algo de la historia de La Marquesa
Se sabe que los primeros pobladores de lo que hoy conocemos como La Marquesa fueron los teotihuacanos y que después fue refugio para los tepanecas cuando perdieron la guerra contra Texcoco y Tenochtitlan. Tiempo antes de la llegada de los españoles el tlatoani mexica Axayácatl conquistó la zona y sometió a todos sus habitantes.
Con la conquista española el área le fue otorgada a Hernán Cortés como parte del Marquesado del Valle de Oaxaca y en 1532 él se la dio a su esposa Juana de Zúñiga —una de las primeras aristócratas que se instalaron en América— y desde esos tiempos se le quedaría al bosque el nombre de La Marquesa.
En tiempos de la Independencia, en octubre de 1810, en este bosque se llevó a cabo la Batalla del Monte de las Cruces que fue decisiva para el ejército insurgente de Miguel Hidalgo, que quedó victorioso ante el general español Torcuato Trujillo y sus huestes para avanzar al pueblo de Cuajimalpa.
Vamos a La Marquesa
Nuestro picnic puede ser perfecto. La emoción, la diversión y las sorpresas no nos van a faltar en La Marquesa. Podemos ejercitarnos o leer un buen libro bajo la sombra de los árboles mientras aspiramos el fresco olor a bosque y disfrutamos de un día increíblemente relajado.
Este Parque Nacional es uno de los bosques más visitados por los capitalinos. Está en el km 34 de la carretera México-Toluca y está abierto de lunes a domingo de 7:00 a 17:00 horas y el precio de la entrada es de aproximadamente 25 pesos por automóvil. La Marquesa nos espera con su clima templado y su bosque.
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