
22 de Agosto 2025.- Al menos cuatro personas fueron ejecutadas y posteriormente incineradas dentro de un vehículo Nissan en la comunidad indígena mixteca de Refugio de Apantla, municipio de Ayutla de los Libres, en la Costa Chica de Guerrero. El hallazgo ocurrió esta tarde y provocó la inmediata intervención de efectivos del Ejército mexicano y de la Fiscalía General del Estado para realizar las diligencias correspondientes.
Reclamo de seguridad por parte de la UPOEG
Antes de estos hechos, en el pueblo de El Cortijo, la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) había solicitado a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo enviar seguridad a la región, luego de que el fin de semana pasado fueron asesinados 13 policías comunitarios en una emboscada. Además, ayer civiles armados irrumpieron a balazos en el poblado, atacando el kiosko y la comisaría municipal, incrementando la alarma entre la población.
El gobierno estatal tenía contemplada una reunión con líderes de la UPOEG para este jueves, misma que fue cancelada apenas dos horas antes de llevarse a cabo. Este retraso generó mayor tensión, pues los habitantes sienten que sus demandas de seguridad no han sido atendidas y que la violencia se mantiene sin control en la zona.
Ataque atribuido a Los Ardillos
De acuerdo con coordinadores de la comisaría municipal, que prefirieron mantenerse en anonimato, el ataque del sábado fue perpetrado por el grupo delictivo Los Ardillos. Los 13 policías comunitarios viajaban en seis camionetas para realizar recorridos de rutina cuando fueron emboscados y masacrados por hombres fuertemente armados. La agresión evidencia la alta capacidad de estos grupos criminales para operar en comunidades indígenas y zonas rurales de Guerrero.
La Fiscalía General del Estado (FGE) fue señalada por los coordinadores de no acudir de inmediato a realizar el peritaje. Solo se presentaron ante la presencia de medios de comunicación, mientras que la UPOEG mostró una de las camionetas utilizadas en el ataque, dejando en evidencia la gravedad y brutalidad del incidente.
Estos hechos no son aislados. La Costa Chica de Guerrero enfrenta una escalada de violencia derivada de enfrentamientos entre grupos criminales y policías comunitarios. Las acciones recientes reflejan no solo un reto de seguridad, sino también una profunda vulnerabilidad institucional y social en comunidades indígenas. Expertos en seguridad sugieren que la falta de presencia efectiva del Estado fomenta la impunidad y perpetúa los ataques, convirtiendo a poblaciones enteras en víctimas de violencia estructural.