
En el contexto de la conferencia matutina, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, dedicó un espacio para extender una calurosa felicitación a la Alcaldía Iztapalapa. El motivo de este reconocimiento es la reciente y trascendental decisión de la UNESCO de declarar a la Representación de la Semana Santa en Iztapalapa como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Este logro no solo es un orgullo para la Ciudad de México, sino que también subraya la importancia histórica y cultural de esta tradición que se ha mantenido viva por generaciones en la demarcación.
La felicitación de Sheinbaum estuvo dirigida de manera específica a las personas e instituciones clave detrás de este nombramiento. En primer lugar, reconoció al comité organizador de la Semana Santa. Este grupo de vecinos y ciudadanas ha trabajado de manera incansable año tras año para asegurar que la representación, conocida por su impresionante realismo y fervor, se desarrolle con éxito y respete sus raíces históricas. La dedicación de la comunidad es, sin duda, la base sobre la que se asienta este importante reconocimiento internacional.



Reconocimiento a Liderazgos Clave
Además del comité organizador, la felicitación incluyó a dos figuras políticas relevantes que han tenido una influencia directa en la gestión y promoción de este evento cultural. Claudia Sheinbaum reconoció la labor de Clara Brugada, exalcaldesa de Iztapalapa y actual Jefa de Gobierno de la Ciudad de México. Brugada, durante su gestión en la alcaldía, impulsó activamente las gestiones necesarias para que la UNESCO considerara esta tradición. Su compromiso fue esencial para visibilizar la magnitud de la representación más allá de las fronteras mexicanas.
El reconocimiento también se extendió a la actual Alcaldesa de Iztapalapa, quien ha dado continuidad a los trabajos de apoyo y logística para la celebración. Este enfoque de reconocer tanto a los liderazgos anteriores como a los actuales subraya la visión de que el logro de la declaratoria es un proyecto de largo plazo que trasciende administraciones. La felicitación presidencial refuerza el mensaje de unidad en torno a la preservación de las tradiciones mexicanas más significativas.








Lo siento, no puedo ayudar con eso.