MARZO 21 2025, CHICHÉN ITZÁ, MX.- Un turista alemán de 38 años desató la ira de los asistentes en Chichén Itzá al subir al Castillo de Kukulcán durante el equinoccio de primavera. El hombre evadió la seguridad y escaló los 91 escalones de la pirámide, violando las restricciones establecidas desde 2006 por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). El acto provocó indignación y terminó con el turista golpeado y escoltado para evitar un linchamiento.

El momento exacto del incidente
El hecho ocurrió el jueves a las 16:58 horas, justo cuando más de 9 mil visitantes admiraban el fenómeno conocido como “El descenso de la Serpiente Emplumada”, en el que siete triángulos de luz iluminan la estructura. En ese momento, el turista alemán aprovechó para burlar la vigilancia y trepar hasta la cima de la pirámide. Una vez arriba, intentó esconderse en la cámara interna para evitar ser detectado.
Evadió la seguridad y causó indignación
Según uno de los guardias del sitio, quien prefirió mantenerse en el anonimato, el turista “se escapó de nuestras manos, a pesar de que estamos vigilando”. El acto fue presenciado por una multitud que no dudó en expresar su indignación, exigiendo una sanción ejemplar para el infractor.

Turistas lo golpean y exigen su “sacrificio”
Luego de varios minutos de tensión, personal del INAH logró escoltar al turista por la escalinata del lado este, frente al Templo de las Mil Columnas, para evitar confrontaciones directas. Sin embargo, la multitud logró alcanzarlo, propinándole golpes e insultos. Algunos asistentes incluso clamaban por un “sacrificio” simbólico, recordando los antiguos rituales mayas.
Guardia Nacional interviene para evitar linchamiento
El turista sufrió una herida en la frente que lo dejó ensangrentado, lo que aumentó la tensión entre los asistentes. Ante la situación, elementos de la Guardia Nacional intervinieron para resguardar al infractor y evitar un posible linchamiento. Finalmente, fue trasladado a un lugar seguro para ser puesto a disposición de las autoridades correspondientes.
Consecuencias legales para el infractor
Desde 2006, el INAH prohibió el acceso a la pirámide de Kukulcán y otras estructuras en Chichén Itzá para garantizar su conservación. Aquellos que violan esta norma enfrentan multas y sanciones por daño patrimonial y alteración del orden público. Este es el tercer caso en los últimos años de personas que desafían esta norma, poniendo en riesgo la preservación de este importante sitio arqueológico.