
24 OCTUBRE 2025-INTERNACIONAL-Una mujer y sus dos hijos menores fueron liberados en Málaga tras permanecer 13 días secuestrados por la expareja de la víctima, que los obligó a recorrer más de 2.000 kilómetros bajo amenazas constantes. La Policía Nacional española actuó de manera coordinada con autoridades francesas para localizar el vehículo y rescatar a las víctimas, quienes se encontraban en un estado crítico tras casi dos semanas de cautiverio.
El secuestro comenzó el 3 de octubre en Francia, cuando el agresor retuvo a su expareja y a los menores. Tras romper el teléfono móvil de la mujer, la dejó incomunicada mientras la obligaba a conducir largas distancias por España y Portugal. El hombre pretendía huir a Argelia para evitar cumplir dos órdenes de detención europeas, sometiendo a la familia a condiciones inhumanas: escaso descanso, alimentación limitada a pan, galletas y atún, y ausencia de higiene básica.
El mensaje desesperado que salvó sus vidas
En un descuido, la víctima logró hacerse con un teléfono y envió un mensaje urgente a un familiar: “Me quiere matar, avisa a la policía que son los únicos que me pueden salvar, y borra todo para que él no lo vea”. Este SOS permitió a las autoridades rastrear el vehículo y montar un operativo que finalmente garantizó la liberación segura de la familia.
La UFAM Central diseñó un operativo especial dada la peligrosidad del agresor y la situación extrema de las víctimas. Se priorizó actuar con rapidez y discreción para evitar cualquier reacción violenta. Gracias a la coordinación entre unidades españolas y francesas, se logró interceptar el vehículo sin incidentes adicionales.
Rescate y estado de las víctimas
Al ser rescatados, la mujer y los niños presentaban signos evidentes de desnutrición, deshidratación, hematomas y mordeduras en el caso de la madre, y numerosas picaduras de insectos en los menores. Fueron trasladados de inmediato a un hospital para recibir atención médica especializada y evaluar posibles secuelas físicas y psicológicas tras el traumático episodio.
Durante el registro del vehículo, la policía encontró el cuchillo con el que el agresor amenazaba a la familia y el teléfono destrozado de la víctima. El hombre fue detenido como presunto autor de múltiples delitos: homicidio en grado de tentativa, agresión sexual agravada y continuada, detención ilegal, reclamación judicial internacional, malos tratos en el ámbito de género y doméstico, y delitos contra la intimidad y daños.
Tras pasar a disposición judicial, el agresor ingresó en prisión provisional a la espera del juicio. Las autoridades destacaron la importancia de la cooperación internacional y la rápida reacción de la UFAM para proteger a la víctima y a sus hijos. Este caso subraya la necesidad de protocolos eficientes para intervenir en situaciones de alto riesgo donde la vida de menores está en juego.



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