La presidenta Claudia Sheinbaum ha abordado dos temas cruciales de la justicia transfronteriza y nacional, confirmando la detención en Estados Unidos de Víctor Manuel Puga y anunciando que México ha solicitado formalmente su extradición. Paralelamente, la mandataria hizo un llamado a la nueva dirección de la Fiscalía para que actúe con celeridad y eficacia en el caso de Raúl Beyruti, con el objetivo de evitar impunidad.
Puga detenido: El proceso de extradición
La presidenta Sheinbaum ratificó la información sobre la detención de Víctor Manuel Puga en territorio estadounidense. La detención de Víctor Manuel Puga se suma a los esfuerzos binacionales para combatir la delincuencia organizada y llevar ante la justicia a individuos requeridos por el Estado mexicano. La detención por parte de las autoridades de Estados Unidos marca el inicio de una fase legal y diplomática.
México, a través de sus canales oficiales, ya ha presentado la solicitud formal de extradición de Víctor Manuel Puga. Este proceso es de alta prioridad para la administración actual, que busca asegurar que los acusados de crímenes en el país sean juzgados bajo las leyes mexicanas. La cooperación con Estados Unidos en estos casos es fundamental para el éxito de la estrategia de seguridad y justicia.
Beyruti: El reto de la nueva Fiscalía
En otro frente de justicia, la presidenta se refirió al caso de Raúl Beyruti, un empresario que enfrenta serias acusaciones. Sheinbaum puntualizó que el expediente de Raúl Beyruti recae ahora en el nuevo equipo que ha sido designado al frente de la Fiscalía. Este cambio de personal implica una renovación en la gestión del caso, que debe traducirse en resultados concretos.
La instrucción de la presidenta es clara: el nuevo equipo debe avanzar de manera decisiva en las investigaciones y acciones legales correspondientes. El mensaje principal es evitar a toda costa la impunidad en el caso de Raúl Beyruti. Este señalamiento desde la máxima autoridad del Ejecutivo subraya la importancia de la transparencia y la celeridad judicial en casos de alto perfil que involucran a figuras empresariales.
El caso de Raúl Beyruti es emblemático en la lucha contra la evasión fiscal y el uso de esquemas de subcontratación ilegales (outsourcing). La trascendencia de este proceso judicial va más allá de la figura del empresario, pues su desenlace sentará un precedente significativo en la aplicación de la ley contra delitos de cuello blanco en México. La presión por parte de la presidenta para evitar la impunidad en el caso de Raúl Beyruti es vista como un respaldo a las reformas laborales y fiscales que buscan regularizar las prácticas empresariales en el país.
