
En medio de lágrimas y conmovida por una carta de disculpa, #KimKardashian declaró ante un tribunal en París que perdona al principal acusado del violento robo que sufrió en 2016, cuando fue atada y despojada de joyas valuadas en 10 millones de dólares. La empresaria aseguró que aunque su vida cambió para siempre por ese hecho, cree en las segundas oportunidades. El juicio por este caso, que ha sido catalogado por la prensa como el “atraco del siglo”, continuará hasta el 23 de mayo.
Kardashian relató cómo esa noche creyó que iba a morir. Contó que rezó por su familia mientras era amenazada con una pistola y atada con una cremallera. Según su testimonio, los ladrones fingieron ser policías y entraron a su habitación en un exclusivo hotel de París, aprovechando que ella se había quedado sola mientras su familia salía de fiesta. Uno de los ladrones se llevó un anillo de diamantes de 3.5 millones de euros, regalo de su entonces esposo Kanye West.
Diez sospechosos están siendo juzgados, la mayoría hombres de edad avanzada con apodos como “Viejo Omar” y “Ojos Azules”, que recuerdan a criminales de películas antiguas. El principal acusado, Aomar Ait Khedache, admitió haberla atado, pero negó ser el cerebro del golpe. Otro involucrado, Yunice Abbas, incluso escribió un libro sobre el robo, revelando detalles como que su bolsa con el botín quedó atorada en la bicicleta con la que intentó huir.

Las autoridades también investigan la posible participación del hermano del chofer de Kardashian en París, quien habría avisado a los ladrones que la celebridad estaba sola. Sin embargo, su defensa asegura que, con más de 350 millones de seguidores en redes sociales, cualquiera podía saber su ubicación. Además, se reveló que el guardaespaldas de la estrella no estaba con ella en ese momento, lo que facilitó el crimen.
Kardashian ha sido descrita como «famosa por ser famosa», pero con el paso de los años se ha convertido en una influyente empresaria, activista por la justicia penal y una figura global. A pesar del horror que vivió, su testimonio mostró fortaleza y deseo de cerrar un capítulo doloroso en su vida. Aseguró que sigue amando París, aunque el trauma sigue presente y ha cambiado su manera de vivir.
El juicio ha atraído a cientos de periodistas y curiosos que se han apostado afuera del tribunal en París. Se espera que concluya el 23 de mayo, con la decisión final sobre uno de los casos más mediáticos que ha enfrentado una celebridad en los últimos años. A pesar del perdón de Kim Kardashian, el juicio sigue su curso, y con él, la atención del mundo.
La verdad es que me parece genial que se hable de este tema, porque muchas veces se ignora lo importante que es. Sin embargo, creo que deberían darle más espacio a las voces de quienes realmente están afectados. A veces, se siente que solo se habla desde un lugar muy lejano y no se escucha a los que viven la situación día a día.
Es genial ver que se están tomando medidas para mejorar la situación, pero a veces siento que se quedan cortos en lo que realmente se necesita. Hay que hacer más para que los cambios sean efectivos y no solo un parche.
La verdad es que me parece un poco exagerado lo que se dice en la noticia. A veces, se sacan conclusiones muy rápidas sin tener todos los datos. Hay que tener cuidado con eso, porque puede llevar a malentendidos y a que la gente se forme opiniones erróneas. Es mejor esperar y ver cómo se desarrollan las cosas antes de opinar.