Elementos de Tránsito Municipal de Tuxpan, Veracruz, despojaron de su mercancía a comerciantes de flores de muerto por supuestamente no acceder a pagar mil pesos diarios por derecho de piso en la zona del mercado de la ciudad.Los comerciantes difundieron en redes sociales un video donde se observa a los funcionarios subiendo las flores de cempasúchil y ‘moco de pavo’ a la batea de una camioneta.
Los afectados han alzado la voz para denunciar que, mientras luchan por reabrir sus negocios o vender sus mercancías a pie de calle, son víctimas de extorsión. De manera cotidiana, inspectores y agentes de Tránsito se presentan en sus zonas de trabajo para exigirles una cuota ilegal. Estos cobros se han convertido en una carga insostenible, sumándose a los gastos de reparación y a la inundación de pérdidas materiales que ya enfrentan.
💸 Cobro de Piso Diario para Poder «Trabajar»
La denuncia detalla que la extorsión asciende a una cifra alarmante: mil pesos diarios. Este dinero se exige a los comerciantes a cambio de una «licencia» informal para que puedan desempeñar sus labores. La inundación que azotó la ciudad no eximió a nadie de este cobro, pues los inspectores parecen ver en la desesperación de los vendedores una oportunidad de lucro personal. Un comerciante en desgracia, intentando subsistir, debe pagar esta cantidad solo por el derecho a intentar ganar algo de dinero.
🚫 El Que No Paga, Pierde Lo Poco Que Le Queda
Quienes se niegan a ceder a la extorsión o simplemente no cuentan con el dinero para pagar los mil pesos diarios sufren represalias inmediatas y devastadoras. Los inspectores y agentes proceden a confiscarles toda su mercancía y herramientas de trabajo. La inundación de las calles ya se había llevado sus bienes, y ahora las autoridades se llevan lo poco que lograron rescatar o adquirir. Esta práctica es un atropello que aniquila las posibilidades de recuperación de las familias afectadas por la inundación.
Los comerciantes relatan que esta situación los mantiene en un círculo vicioso de desesperación. Después de la inundación, pidieron ayuda y apoyo, pero en su lugar encontraron una barrera de corrupción que les impide levantarse. La denuncia es un llamado urgente a las autoridades superiores del estado y del municipio de Tuxpan para que pongan un alto a estos abusos, investiguen a los funcionarios señalados y garanticen que la ayuda llegue, en lugar de más perjuicios.
Es imperativo que se actúe con rapidez, pues la inundación de la tragedia está siendo magnificada por la inundación de la impunidad. Los afectados requieren facilidades para trabajar, no multas ni extorsiones disfrazadas de inspección. La justicia en este caso pasa por el castigo a los extorsionadores y por la implementación de medidas reales de apoyo a la reactivación económica de Tuxpan.
Un dato que complementa notablemente la nota es que, en situaciones de desastre natural o inundación grave, las autoridades de los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal) suelen activar mecanismos para la condonación temporal de ciertos impuestos y derechos de suelo a los comerciantes. Esta medida se toma precisamente para facilitar su reactivación sin que la burocracia o los costos fijos los hundan. La denuncia de cobros de «mil pesos diarios» por parte de Tránsito e inspectores, además de ser una extorsión, contraviene el espíritu de cualquier apoyo oficial post-inundación. En muchos casos, las licencias o permisos para trabajar provisionalmente en la vía pública tras una inundación deberían ser gratuitos o tener un costo simbólico, lo que hace aún más grave la exigencia de esta cuota ilegal.
