Un acto de protesta con alto contenido simbólico sacudió el Museo Naval de Madrid el pasado 12 de octubre, Día de la Hispanidad. Dos activistas arrojaron pintura de color rojo contra una pintura que retrata a Cristóbal Colón. El cuadro, que históricamente ha generado debate, muestra al explorador genovés frente a un grupo de indígenas representados en una actitud de sumisión. Este gesto, realizado precisamente en la fiesta nacional española, buscó poner en el centro de la atención la crítica a la colonización.
La Pintura de Colón, Objetivo del Color Rojo de la Protesta
La elección del cuadro por parte de los activistas no fue casual. La obra ataca directamente la narrativa histórica que glorifica la figura de Colón y el proceso de conquista. El pigmento rojo utilizado subraya la violencia y el derramamiento de sangre que la llegada de los europeos significó para los pueblos originarios de América. Este acto de protesta buscó desdibujar la imagen de superioridad que la pintura proyecta, donde los indígenas «se pliegan ante él».
El incidente ocurrió en una fecha clave. El 12 de octubre es el día en que España conmemora su fiesta nacional, tradicionalmente denominada el Día de la Hispanidad, que celebra el «descubrimiento» de América. Los activistas eligieron este momento de máxima visibilidad para confrontar la versión oficial de la historia, obligando a reflexionar sobre el significado de la conmemoración más allá de las celebraciones oficiales y los actos militares.
El contraste entre la celebración en España y el enfoque en América Latina es notable. Mientras que en Madrid se celebra la Hispanidad, la mayoría de los países latinoamericanos han reenfocado la fecha, redirigiendo el foco hacia la diversidad cultural. La jornada se denomina “Día de las Culturas”, “Día de la Pluriculturalidad” o incluso “Día de la Resistencia”, reconociendo el legado indígena y el sufrimiento causado por la conquista. La acción de los activistas con el color rojo en el museo es un eco de esta resistencia que se siente en el continente americano.
La «Leyenda Negra» y la Reescritura de la Historia
El acto de los activistas en el museo se inscribe en el marco de la crítica conocida como la «Leyenda Negra», que cuestiona la brutalidad del imperio español en América. El color rojo arrojado sobre Colón no es solo un acto vandálico, sino una interpelación directa a la museografía y la didáctica histórica española que, según los críticos, ocultan o minimizan las atrocidades cometidas contra los pueblos indígenas. Este acto de protesta obliga a la sociedad a debatir sobre cómo se debe representar en el arte y en la educación el inicio de la colonización y el consecuente exterminio cultural, confrontando la glorificación de Colón con el sufrimiento simbolizado por el color rojo.
Este suceso en el Museo Naval de Madrid no es un caso aislado, sino que se suma a una serie de protestas globales que buscan revisar y recontextualizar figuras históricas asociadas a la colonización y la esclavitud. La acción de los activistas con el color rojo ha abierto un debate inmediato sobre el vandalismo y la libertad de expresión, pero su impacto más profundo radica en el desafío a la memoria histórica y la necesidad de una narrativa más inclusiva y crítica sobre la figura de Colón y el significado del 12 de octubre.
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