
Un sorprendente y condenable incidente de desacato judicial sacudió a la máxima corte de la India: un abogado arrojó un zapato al Presidente del Tribunal Supremo (Chief Justice of India, CJI), justo en el momento en que se desarrollaba una sesión judicial. El agresor, un abogado de nombre aún no completamente revelado, alegó haber actuado bajo la influencia de una «fuerza divina» que lo guio a cometer el acto.
La Acción y la Reacción en la Máxima Corte
El suceso ocurrió en medio de una jornada de alta tensión en el Tribunal Supremo de la India. El zapato fue lanzado directamente contra el CJI, la máxima autoridad judicial del país. Afortunadamente, los reportes iniciales indican que el zapato no impactó al presidente, sino que aterrizó cerca de él. El abogado fue rápidamente reducido y detenido por el personal de seguridad presente en la sala. El momento generó un caos inmediato y obligó a suspender momentáneamente la sesión, un evento que rara vez ocurre en la solemnidad del tribunal.
Un Acto de Desacato Justificado por lo Divino 🙏
Lo que más ha impactado a la comunidad legal y a la opinión pública es la justificación dada por el agresor. Al ser interrogado, el abogado declaró que se sintió «guiado por una fuerza divina» para realizar el acto. Este argumento, que mezcla la acción violenta con una supuesta motivación espiritual, es totalmente inaceptable en un recinto judicial y apunta a posibles problemas de salud mental o a un acto extremo de protesta. El Tribunal Supremo y los colegios de abogados están ahora investigando a fondo el historial y los motivos reales del letrado.
Preocupaciones por la Seguridad y la Autoridad Judicial
Este grave incidente pone en tela de juicio los protocolos de seguridad dentro del Tribunal Supremo, un lugar que debe garantizar la protección de los jueces y la correcta administración de justicia. Arrojar un objeto a un juez, especialmente al Presidente del Tribunal Supremo, se considera un acto flagrante de desacato que busca socavar la autoridad e independencia del poder judicial. La acción ha sido condenada de forma unánime por asociaciones de abogados y juristas, quienes exigen consecuencias legales severas para el responsable, independientemente de sus alegaciones.