
En un movimiento que mezcla política, tecnología y redes sociales, el presidente Donald Trump ha lanzado un video desde la Casa Blanca en el que se atribuye el mérito de mantener a TikTok en funcionamiento. Asegurando que la popular aplicación de videos cortos «sigue viva gracias a él», Trump afirmó que la compañía y sus usuarios le «deben mucho». Su mensaje, con un claro tono político, terminó con un deseo a sus seguidores: «ojalá uno de ustedes llegue a la Oficina Oval.»
La Afirmación: «Yo Salvé TikTok»
La declaración central del presidente es contundente: él intervino para evitar que TikTok fuera prohibida o forzada a vender sus operaciones en Estados Unidos. Durante su administración, la aplicación, propiedad de la empresa china ByteDance, enfrentó serias amenazas de veto por motivos de seguridad nacional y el temor a que el gobierno chino pudiera acceder a los datos de los usuarios estadounidenses. Trump ahora utiliza esta crisis pasada para posicionarse como el benefactor de la plataforma.
El mensaje de que «salvó TikTok» busca, sin duda, generar afinidad entre la base de usuarios de la aplicación, que en gran medida está compuesta por jóvenes. Al afirmar que la app «sigue viva gracias a él», Trump capitaliza la lealtad que muchos sienten hacia la plataforma de entretenimiento. Es una estrategia clara para influir en una audiencia masiva que es crucial en la política actual, especialmente de cara a futuras elecciones.
Un Recordatorio y un Deseo a Sus Seguidores
La frase «Me deben mucho» es un recordatorio directo a TikTok y a sus millones de usuarios en EE. UU. sobre el papel decisivo que jugó el expresidente. Este comentario se interpreta como una solicitud implícita de apoyo político, buscando que la gratitud por la supervivencia de la aplicación se traduzca en votos.
El video concluye con una nota ambiciosa dirigida a sus seguidores en la plataforma: «ojalá uno de ustedes llegue a la Oficina Oval.» Con esto, Trump no solo proyecta un futuro de empoderamiento para sus partidarios, sino que también sugiere una visión de la política más accesible y cercana, rompiendo con el tradicional establishment, un tema recurrente en su retórica.
La aparición de Trump en la aplicación y su reivindicación del mérito por su supervivencia destaca la importancia que las grandes plataformas sociales tienen en el panorama político. TikTok, que fue vista con recelo por su administración en el pasado, es ahora un campo de batalla electoral donde el expresidente busca activamente el respaldo y la influencia sobre la conversación pública.
El contexto crucial de la afirmación de Trump radica en las órdenes ejecutivas que él mismo emitió en 2020, las cuales buscaban prohibir las transacciones con TikTok y forzar su venta a una compañía estadounidense (como Oracle o Microsoft), bajo la amenaza de una prohibición total. Estas órdenes se basaban en preocupaciones de seguridad nacional por la recopilación de datos de ByteDance y su posible acceso por parte del gobierno chino. Sin embargo, estas órdenes se enfrentaron a desafíos legales y nunca llegaron a implementarse por completo, siendo finalmente revocadas por la siguiente administración. Por lo tanto, el expresidente está tomando crédito por el estancamiento legal y político que, irónicamente, él mismo provocó, lo que permitió a TikTok seguir operando en EE. UU.