
16 de Diciembre del 2025.- Un caso sorprendente ha ocurrido en la ciudad de Kansas, en el estado de Misuri, donde una mujer logró salvar su vida gracias a la tecnología. Según reportes recientes de la revista People, la víctima utilizó la herramienta de inteligencia artificial ChatGPT para diseñar un plan de escape seguro y alejarse de su novio. El hombre, identificado como un presunto proxeneta, mantenía a la mujer bajo un control estricto y violento, pero el uso ingenioso de esta aplicación le permitió salir de la vivienda sin levantar sospechas inmediatas de su agresor en un momento crítico.
El acusado en este caso ha sido identificado como Jacquan Wilson, un hombre de 37 años que fue detenido por las autoridades a finales de septiembre. La declaración jurada obtenida por los medios detalla una serie de cargos sumamente graves en su contra, que pintan un panorama de terror para la víctima. Entre los delitos que se le imputan a la pareja de la mujer figuran el tráfico sexual, la promoción de la prostitución, agresión doméstica severa y poner en peligro el bienestar de un menor de edad, situaciones que habían atrapado a la víctima en un ciclo de violencia.
La historia de terror comenzó meses atrás, cuando la mujer conoció a Wilson a través de la red social Facebook y comenzó una relación romántica con él. Sin embargo, lo que parecía un noviazgo normal rápidamente se transformó en una pesadilla de explotación y abusos constantes. Las autoridades policiales informaron que el sujeto estaba involucrado en un negocio ilícito de acompañantes y obligó a la mujer a participar en él, forzándola a mantener relaciones sexuales con diversos clientes varias veces al día bajo coacción.
La estrategia creada por ChatGPT
El punto de quiebre ocurrió el pasado 26 de septiembre, cuando la mujer decidió que era momento de huir, pero necesitaba una excusa que su agresor creyera. Fue entonces cuando recurrió a ChatGPT para redactar un correo electrónico falso pero muy convincente. El texto generado simulaba ser una notificación oficial de una compañía de alquiler de autos, indicando que era obligatorio devolver el vehículo que tenían y cambiarlo por uno nuevo de manera urgente. Esta coartada digital fue lo suficientemente creíble para que Wilson le permitiera salir de la casa con sus pertenencias.
Gracias a este plan asistido por ChatGPT, la mujer pudo conducir hasta el local de la empresa de renta de coches ubicado en el aeropuerto de Kansas. Allí, lejos del alcance de su agresor, pudo reunirse finalmente con oficiales de policía y con sus familiares que la esperaban para ponerla a salvo. Al ser entrevistada por los investigadores, estos notaron de inmediato las evidencias físicas del maltrato, observando múltiples moretones en su cuerpo que coincidían perfectamente con el relato de abuso brutal que ella describió ante la ley.






