Una joya real ausente

REINO UNIDO.— Como cada año en estas fechas, la familia real británica está a punto de entrar en un largo túnel de grandes acontecimientos primaverales y estivales, pero en esta ocasión tendrá que arreglárselas durante mucho tiempo sin una de sus joyas.

El regreso a los asuntos públicos de la princesa Catalina de Gales, que se encuentra en tratamiento privado contra el cáncer, no debería producirse, en el mejor de los casos, antes de septiembre, informa la revista francesa especializada en asuntos de la realeza “Point de Vue”.

La última aparición oficial de Catalina se remonta a la mañana de Navidad de 2023, cuando todos los integrantes del clan Windsor acudieron a la iglesia de Santa María Magdalena, en la finca real de Sandringham, recuerda la revista.

Desde entonces, el Palacio de Kensington anunció a mediados de enero que la princesa fue sometida a una operación abdominal. Luego, el 22 de marzo, la propia Catalina explicó en un mensaje en vídeo que inició un tratamiento de quimioterapia preventiva, en respuesta a las células cancerosas descubierto durante este procedimiento.

“Necesito tiempo, espacio y privacidad durante mi recuperación”, confesó ante la cámara.

Dos meses

Ya pasaron dos meses y desde entonces el Palacio no ha mencionado ninguna fecha para el regreso de la esposa del príncipe Guillermo a sus compromisos.

Sin embargo, según las últimas informaciones obtenidas por Richard Eden, columnista real del “Daily Mail”, la heredera a la corona británica no debería reaparecer en la agenda oficial antes, en el mejor de los casos, del inicio del año escolar en septiembre.

“Sus amigos con los que he podido hablar estos últimos días me sugieren que no la volvamos a ver antes de que termine verano, y eso con la condición de que para entonces esté completamente curada”, escribe el editorialista en la edición del jueves pasado.

“Nadie quiere presionar a Catalina”, explica una fuente cercana al matrimonio. “La única prioridad en este momento es que se mejore”.

El rey Carlos III y el príncipe Guillermo anunciaron en días pasados que reducirán sus compromisos al mínimo estricto en las próximas semanas para no interferir en la campaña anticipadas para la elección del primer ministro, anunciadas por Rishi Sunak tras la caída de su popularidad, que se celebrarán el 4 de julio próximo en el Reino Unido.

Sin embargo, el verano promete ser muy ocupado para los Windsor.

Tras las celebraciones del 80 aniversario del desembarco de Normandía los días 5 y 6 de junio —el rey Carlos III y la reina Camilia ya anunciaron su visita a en Francia —, el sábado 8 de junio tendrá lugar el tradicional “Colonel’s Review”, un pase de lista a las tropas de la Guardia Irlandesa, de la que la princesa de Gales es precisamente coronel honorario.

Queda por ver quién la sustituirá en esta ceremonia.

La Guardia Irlandesa presentará sus colores al soberano la semana siguiente, con motivo del desfile militar “Trooping the Colour”, el Desfile Anual del Cumpleaños del Rey, el 15 de junio.

Un encuentro especialmente esperado por los entusiastas de la monarquía, no sólo por el despliegue de esplendor que genera esta celebración oficial del cumpleaños del soberano, sino también y sobre todo por la ineludible aparición de la familia real en el balcón de Buckingham.

Sobre todo porque el rey quiso extender la invitación este año a su amplia familia, en particular a su prima pequeña Lady Gabriella Windsor, como muestra de su afecto tras su reciente viudez.

Pero todo parece indicar que este año prescindirán de Catalina en el balcón de palacio.

Dos días después se suma a la agenda real la ceremonia en el Castillo de Windsor de la Orden de la Jarretera, la más prestigiosa de las órdenes de caballería del reino, evento en el que el año pasado Catalina deslumbró a los presentes, según los expertos en moda.

Luego llegarán las festividades que marcarán la inauguración de las carreras de caballos llamada “Royal Ascot”, que se celebrarán del 18 al 22 de junio.

Para rematar, el 21 de junio, el príncipe Guillermo celebrará, seguramente en total intimidad, su 42 cumpleaños.— Point de Vue