
Una gran ovación de miles de personas recibió la fumata blanca que a las 18:08 h local informó la elección de un nuevo papa.
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Las más de 40 mil personas reunidas en la plaza de San Pedro estallaron en júbilo y entusiasmo al ver la fumata blanca que indicaba que ya había papa, en un momento lleno de lágrimas y emoción.
El humo blanco tomó por sorpresa a los miles de congregados, que se mostraron exultantes y empezaron a aplaudir y a gritar “Habemus Papa” mientras ondeaban banderas de numerosos países entre las personas que se acercaban a la plaza.
Nadie se lo esperaba, parecía que ya había pasado el momento de la cuarta fumata, cuando de repente al ver el humo blanco, muchos comenzaron a llorar, mientras otros exultantes saltaban de alegría.
“Estamos felices, es el papa que Dios ha querido”, dijo a Efe, sin conocer aún el nombre del pontífice, el cura mexicano Francisco Gallardo, que está en la plaza desde ayer para estar en el momento.
“Pasábamos hoy de visita a Roma y hemos visto la fumata”, comentó por su parte Carme, profesora de un instituto de la ciudad española de Manacor que acompaña a un grupo de alumnos de viaje en Italia para un intercambio escolar.
“Es increíble estar aquí en este momento”, dijo Christopher, un joven turista de EE.UU. que aprovechó la ocasión para acercarse hasta el Vaticano y ver el ambiente.
La Plaza de San Pedro no estaba inicialmente tan llena como en la primera jornada del cónclave, pero eso no impidió que un enorme clamor se haya levantado cuando de la chimenea sobre la Capilla Sixtina se ha empezado a elevar el humo blanco.
Los congregados elevaron un grito generalizado y grandes aplausos, mientras los fieles y curiosos agitan banderas nacionales.
Las decenas de miles de personas continuaron celebrándolo durante los cerca de diez minutos en los que sonaron las seis campanas de la basílica y seguía saliendo el humo de la chimenea de la Capilla Sixtina.
Dado que en el cónclave se vota cuatro veces al día, sumando la única que hubo ayer miércoles, la elección se ha producido presumiblemente en el cuarto escrutinio.
Ayer miércoles y en la mañana de este jueves las fumatas habían sido negras, indicando que aún no había acuerdo en las tres primeras votaciones.
Según la normativa vaticana, para ser elegido papa son necesarios dos tercios de los votos. En este caso los cardenales electores son 133 por lo que el elegido necesita, como mínimo, 89 votos.
Con información de EFE
Es genial ver cómo la gente se une en momentos así, llenos de emoción y esperanza. La fumata blanca siempre trae una mezcla de alegría y anticipación, y ver a tantas personas aplaudiendo y celebrando es un recordatorio de que hay cosas que nos conectan a todos, sin importar de dónde venimos. Sin embargo, también me parece que a veces se le da demasiada importancia a estas ceremonias, cuando hay tantos problemas que resolver en el mundo.
Es emocionante ver cómo la gente se une en momentos así, llenos de esperanza y emoción. La fumata blanca siempre trae un aire de renovación y alegría. Sin embargo, a veces me pregunto si realmente todos comprenden lo que esto significa para la Iglesia y el mundo. Es un gran evento, pero también debería hacernos reflexionar sobre los desafíos que enfrenta la comunidad católica hoy en día.