25 de Septiembre del 2025.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha denunciado lo que califica como un «triple sabotaje en la ONU» durante su participación en la Asamblea General en Nueva York, exigiendo una investigación y el arresto de los responsables. Una serie de fallos técnicos, que incluyeron la detención de una escalera mecánica, un apagón en el teleprompter y problemas con el sistema de sonido, fueron interpretados por el mandatario no como una coincidencia, sino como un ataque coordinado. La Organización de las Naciones Unidas, por su parte, ha desestimado las acusaciones, atribuyendo los incidentes a simples errores técnicos y a la gestión del propio equipo de la Casa Blanca.
A través de un extenso mensaje en su red social Truth Social, Trump describió los hechos como «muy siniestros» y aseguró que no se quedará de brazos cruzados. «Esto no fue una coincidencia, fue un triple sabotaje. Deberían estar avergonzados», afirmó el presidente, quien confirmó haber enviado una carta al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para solicitar una pesquisa inmediata. La gravedad de su acusación se reflejó en su crítica a la organización, de la que dijo: «No me extraña que Naciones Unidas no haya podido cumplir con la función para la que fue creada».
La Versión de la ONU: Errores Técnicos y Responsabilidad de la Casa Blanca
La Organización de las Naciones Unidas respondió a las graves acusaciones del presidente Trump ofreciendo explicaciones técnicas para cada uno de los incidentes. En el caso de la escalera mecánica, que se detuvo abruptamente mientras el mandatario y la primera dama Melania Trump subían, el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, aclaró que la causa más probable fue un accidente. Según el comunicado, un camarógrafo de la propia delegación estadounidense habría activado «involuntariamente» el botón de parada de emergencia al llegar al final de la escalera mientras caminaba de espaldas para grabar.
En cuanto a los otros dos presuntos actos de sabotaje, la ONU también se desmarcó de la responsabilidad. Respecto al fallo del teleprompter, que según Trump se quedó en negro durante los primeros quince minutos de su discurso, la organización señaló que dicho equipo era operado exclusivamente por personal de la Casa Blanca, por lo que no tenían comentarios al respecto. La ONU tampoco se pronunció directamente sobre las quejas del presidente acerca del mal funcionamiento del sistema de sonido en el auditorio principal de la Asamblea General, donde, según Trump, no se pudo escuchar claramente su intervención.
De la Broma a la Exigencia de Encarcelamiento
El tono del presidente Trump respecto a los incidentes cambió drásticamente en menos de 24 horas. Durante la jornada del martes, tras la detención de la escalera mecánica, el mandatario había restado importancia al hecho, llegando incluso a bromear sobre la situación. Sin embargo, al día siguiente, su postura se endureció hasta convertirse en una seria acusación de conspiración. Esta escalada culminó con una exigencia contundente en su publicación de Truth Social, donde afirmó que el episodio fue una «vergüenza real» para la ONU y sentenció: «Los que hicieron esto deberían ir presos».
