“Es un hombre enfermo, débil y patético que no puede presentarse a unas elecciones”, afirma el republicano
Donald Trump, expresidente y candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos, bromeó sobre la debilidad política de su rival, el presidente Joe Biden, hoy sábado en su primer mitin tras el intento de asesinarlo hace una semana.
Biden aspira a la candidatura del Partido Demócrata para buscar la reelección el 5 de noviembre próximo, pero hoy sábado Mark Takano, congresista demócrata por California, le pidió que “le pase la antorcha” a la vicepresidenta Kamala Harris.
El atentado contra Trump
En la tarde del sábado 13 de julio de 2024, Trump llevaba ocho minutos de su discurso ante sus simpatizantes reunidos en Butler, Pensilvania, cuando una bala le rozó la oreja derecha en un atentado con un rifle semiautomático AR-15.
El atacante disparó desde un techo a 200 metros de Trump. Fue identificado como Thomas Matthew Crooks, de 20 años de edad. Francotiradores del Servicio Secreto lo mataron.
El vídeo del mitin y atentado fue retirado de la página de Trump en Facebook el mismo sábado 13 de julio.
Primer mitin tras el atentado
Hoy sábado 20 de julio, en su primer mitin desde el fallido atentado, Trump salió al escenario en un estadio repleto de seguidores entre gritos de “USA” y “¡Lucha!” en Grand Rapids, ciudad del estado de Michigan ubicada a 673 km al norte de Butler, Pensilvania.
Con un vendaje ligero y discreto en la oreja lesionada, el candidato republicano agradeció a sus simpatizantes por su apoyo.
Luego empezó a lanzar dardos al presidente de EE.UU. Dijo que la campaña de Biden lo describe como una “amenaza para la democracia” y luego afirmó: “La semana pasada me llevé un balazo por la democracia”.
Después se desligó del Proyecto 2025, al que la campaña de Biden lo asocia, calificando a sus creadores de “derecha radical” y “extremista”.
Abucheos y vítores
Seguidamente, Trump propuso una encuesta sobre qué candidato demócrata es “mejor si queremos ganar”: el nombre de la vicepresidenta Kama Harris fue recibido con abucheos, y el del presidente Biden con vítores.
“No creo que tengamos que ir mucho más lejos”, anotó el candidato.
“En este mismo momento, los jefes del Partido Demócrata están frenéticamente intentando derribar los resultados de las primarias de su propio partido para sacar a Joe Biden de las papeletas”, expresó y más tarde se burló de que el partido “no tiene ni idea de quién es su candidato”.
También capitalizó la débil actuación de Biden en el debate de finales de junio, tras el cual empezaron las presiones de líderes demócratas para que Biden abandone la carrera presidencial.
“¿Quién ganó el debate, Biden o Trump?”, preguntó el magnate y sus seguidores le respondieron con gritos de “Trump”.
“Hombre enfermo, débil y patético”
“Este es un hombre enfermo, débil y patético que no puede presentarse a unas elecciones”, declaró con dureza el expresidente sobre Biden.
“Cuando voten por Biden, probablemente estén votando indirectamente a Harris, de todas formas”, agregó el exmandatario.
Entonces, Trump aprovechó para repetir sus denuncias infundadas de fraude electoral o “trampas” en las elecciones de 2020 que perdió ante Biden.
Con un tono distendido y visiblemente cómodo, Trump retomó muchos puntos de campaña que enarboló en su discurso de aceptación de la nominación republicana esta semana, como el control de la inmigración ilegal y “recortes fiscales adicionales”.
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