
El Kremlin se pronunció sobre la propuesta de una tregua navideña entre Rusia y Ucrania, dejando claro que Moscú no está interesado en un cese temporal de las hostilidades. El portavoz presidencial, Dmitri Peskov, afirmó que un alto el fuego de corto plazo solo daría un respiro a Kiev sin resolver el conflicto de fondo, lo que no coincide con los objetivos rusos.
Peskov explicó que Rusia busca una solución estable y de largo plazo, y no medidas improvisadas que, en su opinión, carecen de viabilidad. En este contexto, la idea de una tregua navideña fue calificada como insuficiente para avanzar hacia un acuerdo real que garantice la seguridad regional.
El vocero subrayó que Moscú quiere detener la guerra alcanzando sus propios objetivos estratégicos y protegiendo lo que considera sus intereses legítimos. Desde su perspectiva, una tregua navideña no aportaría garantías sólidas ni sentaría las bases para una paz duradera en Europa.
Tregua navideña y postura de Moscú
Según Peskov, Rusia no desea un alto el fuego que permita a Ucrania reorganizarse militarmente. Insistió en que la prioridad del Kremlin es lograr un acuerdo que elimine las causas profundas del conflicto, en lugar de aceptar pausas temporales como la tregua navideña propuesta por líderes europeos.
El portavoz reiteró que cualquier negociación debe considerar la seguridad de Rusia a largo plazo. En este sentido, señaló como factores clave la expansión de la OTAN y la situación de la población rusoparlante en Ucrania, elementos que Moscú considera centrales para alcanzar una paz real más allá de una simple tregua navideña.
Tregua navideña y reacciones internacionales
La propuesta de cesar las hostilidades durante las fiestas fue planteada por el canciller alemán Friedrich Merz en una conferencia conjunta con el presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, quien respaldó la iniciativa. Sin embargo, la respuesta del Kremlin dejó claro que una tregua navideña no cumple con las condiciones que Rusia considera necesarias.






