
La sentencia histórica contra Joaquín “El Chapo” Guzmán ha desatado un efecto dominó: al menos catorce narcotraficantes mexicanos han decidido declararse culpables en cortes estadounidenses en lugar de ir a juicio, en un intento por mitigar condenas draconianas.
Entre ellos destaca José González Valencia, uno de los líderes del grupo Los Cuinis, cuya confesión le valió 30 años de cárcel en lugar de cadena perpetua. Su estrategia de cooperación con la justicia constituye una vía cada vez más frecuente entre dirigentes del crimen organizado. De forma similar, Edgar Veytia, exfiscal de Nayarit y aliado de los Beltrán Leyva, aceptó su culpabilidad en una corte de Brooklyn y fue sentenciado a 20 años, tras colaborar con testimonio en el juicio de Genaro García Luna.
Otros casos emblemáticos incluyen a Jesús Raúl Beltrán León, alias “El Trébol”, quien prefirió evitar el juicio y fue condenado en 2029 a 27 años. En junio de 2021, Emma Coronel Aispuro, esposa de El Chapo, aceptó cargos de lavado de dinero y narcotráfico, recibiendo una pena reducida que combinó prisión (36 meses) y libertad supervisada.
También se declaró culpable Iván Reyes Arzate, ex mando de la Policía Federal, en 2022; fue condenado a 10 años tras colaborar contra García Luna. Jessica Johanna Oseguera González, hija de Nemesio Oseguera del CJNG, recibió 30 meses de prisión por violar normas financieras. Jorge Humberto Pérez Cázares, alias “El Cadete”, fue sentenciado a 20 años en enero de 2025 tras admitir su papel en tráfico internacional de cocaína. Otros acusados como “El Huevo” y el abogado Héctor Alejandro Páez García también alcanzaron acuerdos al declararse culpables a finales de 2024 y mayo de 2025, respectivamente.
La estrategia de pactar con la justicia estadounidense se ha consolidado como un recurso estratégico entre capos mexicanos. Casos como el de Vicente “El Vicentillo” Zambada, Jesús “El Rey” Zambada y Edgar Valdez Villarreal —quienes colaboraron a cambio de reducciones de sentencia— han marcado un precedente desde hace años. Incluso, figuras del CJNG como Ovidio “El Ratón” Guzmán han seguido ese camino: tras declararse culpable en Chicago en julio de 2025, se comprometió a colaborar significativamente con las autoridades estadounidenses.