11 DE DICIEMBRE DEL 2025 – INTERNACIONAL. El panorama político entre Estados Unidos y Colombia se ha tensado notablemente tras las declaraciones del presidente estadounidense, Donald Trump, dirigidas a su homólogo colombiano, Gustavo Petro. Trump advirtió que Petro «va a meterse en grandes problemas si no espabila» y lanzó una amenaza directa: «Mejor que espabile o será el siguiente. Espero que esté escuchando. Será el próximo». Esta confrontación surge en el contexto de las críticas de Petro hacia la política que Washington aplica en América Latina, lo que subraya una marcada diferencia en las visiones regionales de ambos líderes.
El intercambio de palabras ha escalado rápidamente. Cuando se le preguntó si llamaría al líder colombiano, como lo hizo con el venezolano Nicolás Maduro, Trump fue evasivo, aunque se apresuró a reiterar un señalamiento clave en su política exterior: «Colombia produce un montón de drogas. Tienen fábricas donde elaboran cocaína». Esta fijación en el problema del narcotráfico colombiano alimenta la tensión y justifica, desde la óptica de Washington, la ofensiva militar en el Caribe. La crítica de Trump se centra exclusivamente en el volumen de producción de drogas, ignorando los esfuerzos del gobierno de Petro en la lucha antinarcóticos.
La Ofensiva Regional y las Advertencias de Intervención
El jefe de la Casa Blanca se encuentra en medio de una ofensiva militar en el Caribe y el Pacífico, supuestamente dirigida contra los cárteles de la droga. Desde el inicio de estos ataques, Trump ha insistido en que una intervención militar en tierra contra los «narcoterroristas» podría llegar «muy pronto». Lo más preocupante para la región es que estas ofensivas, según el propio Trump, no se limitarían a Venezuela, sino que podrían extenderse a otros países, incluyendo a México y, tácitamente, a Colombia, lo que incrementa la preocupación por la soberanía.
Las amenazas de una intervención en suelo extranjero han sido recurrentes por parte de Trump, lo que explica la reacción del presidente Petro. El mandatario colombiano no se quedó callado ante las críticas. En lugar de limitarse a defenderse, lanzó una invitación directa a su homólogo: «No espero que me invite a Washington, sino que venga a Colombia a ver qué son laboratorios de cocaína, cómo se destruyen y cuánto incautamos de drogas».
Petro Acusa a Trump de Desinformación Total
La respuesta de Gustavo Petro fue contundente y apuntó a la raíz de lo que considera un malentendido peligroso: la desinformación. Durante un consejo de ministros, Petro aseveró que «Trump es un hombre muy desinformado sobre Colombia», una situación que calificó como «una lástima». Según el mandatario, esta ignorancia «desecha al país que más sabe de tráfico de cocaína» y sugiere que los interlocutores de Trump en la región lo están «engañando por completo» sobre la realidad colombiana y los resultados de la lucha antidrogas que lidera el gobierno de Petro.
Mientras se desarrollaba este cruce diplomático, el presidente Petro también tuvo un momento para instar a su par venezolano, Nicolás Maduro, a avanzar hacia un gobierno de transición y adoptar una amnistía para los opositores. Esta acción, buscando la estabilidad regional y la democracia, se da incluso cuando los colombianos se movilizaron en apoyo a su país. Diversos movimientos sociales hicieron un llamado a izar la bandera nacional como un acto de defensa de la soberanía, mostrando una unificación ante lo que se percibe como amenazas externas al gobierno de Petro.
El Contexto de la Estrategia Antidrogas de Gustavo Petro
