Como parte de la Selección oficial del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) dentro de la Sección Michoacana de cortometrajes animados, se encuentra una pieza maravillosa titulada Sueños extraterrestres dirigida por el artista Fernando Llanos.
A Llanos lo recordamos por la producción de Matria de 2014, ganadora en el FICM de ese año, y que nos presentó la historia de la Legión de Guerrilleros Mexicano, un grupo que se dice estaba conformado por 100 mil charros que estaban dispuestos a defender nuestro país de una invasión nazi en la década de los 40. Una joya.
Ahora, vuelve con una pieza mucho más corta, pero más divertida, y hasta podemos decir que honesta. Sueños extraterrestres es una animación que nos relata tres sueños que tuvo Llanos durante una primavera en Mérida, todos, además, relacionados con extraterrestres.
En realidad fueron cuatro sueños, pero para el corto decidió mostrarnos tres. Por ejemplo, con uno de ellos lo que hizo fue enviarle un audio de Whatsapp a su vecina para contarle lo que había soñado; luego, hizo una acuarela; y luego, tomó ese audio como narración de una animación con base en las acuarelas. PUM. Sueños extraterrestres había nacido.
Durante el marco del FICM, nos reunimos con Fernando Llanos en el Palacio Clavijero del Centro de Morelia, para platicar largo y tendido de los sueños, lo que representan, sus interpretaciones y cómo se materializan una vez que los contamos en voz alta.
La paradoja de Zhuang o la paradoja extraterrestre
La paradoja de Zhuang nos plantea un dilema más aterrador que filosófico. Zhuang es un hombre, y nos pregunta si él sueña que es una mariposa, una que revolotea sin consciencia de ser un hombre. ¿O acaso será que la mariposa sueña que es Zhuang?
El horror. ¿Quién sueña a quién? Es como el cuento de “Las ruinas circulares” de Jorge Luis Borges en donde un hombre sueña a otro hombre, su hijo. Cuida todo en su sueño para evitar que su hijo descubra que es el producto de un sueño y no una realidad. Pero pronto, el hombre que sueña descubre que es el hijo de otro hombre que lo ha soñado…
Todo esto nos lleva a los sueños de Llanos con extraterrestres. ¿Nosotros soñamos con extraterrestres o ellos sueñan con nosotros? Y también nos preguntamos si soñándolos, los trajimos a nuestra casa… o al soñarnos vinieron a buscarnos.
‘Sueños extraterrestres’ de Fernando Llanos
En otro de los sueños de Fernando Llanos, era mujer. Pero no era una mujer cualquiera, sino una muy guapa, con flequillo y bailaba. Estaba hecha un forro. Y es así, tal cual, como lo vemos en el cortometraje acompañado de su voz, la cual no sólo nos relata el acontecimiento, sino también lo que le hizo sentir.
“No tiene un guion, no hay un arco dramático. Lo soñé y ya“, nos platica. Y funciona bastante bien como película, sobre todo si nos apegamos al entendimiento del artista sobre los sueños como “las primeras películas que tuvo el ser humano. Antes del celuloide, la gente soñaba y en todas las culturas tienen significados e interpretaciones muy poderosas para la vida real“.
Nos contó que un famoso actor de Hollywood soñó que tenía un tumor. Fue al médico, y efectivamente tenía uno. Se lo operó y sobrevivió. La relación entre lo que soñamos y nuestra realidad, no queda clara, y quizá así se deba mantener como la misma existencia de los extraterrestres.
¿Realmente queremos saber si existen, si están entre nosotros o nos miran desde una dimensión distinta Algunos sí, otros no. Lo mismo pasa con los sueños, los cuales permanecen como uno de los misterios más hermosos de la humanidad.
¿Necesitamos saber para qué sirven o podemos dejarlo como una de esas preguntas sin respuesta para intentar buscarla por toda la eternidad? “Estamos en 2024 y hasta la fecha no sabemos para qué sirven los sueños, por qué se dan las imágenes, esas imágenes… Y lo más loco de todo, por lo cual a mí me parece sorprendente, es cuando existe este vínculo entre el sueño y la realidad“.
Quiero entender mis sueños… ¿o no?
Quizá el no entenderlos es lo que nos vincula con la realidad, con nuestra incapacidad de dominarlo todo. En otras palabras, nos gusta pensar que los sueños son ese límite para los humanos, son esa señal de nuestra existencia que somos finitos.
Por eso, como nos dice Llanos, “pensar o tratar de entender los sueños es un bonito ejercicio de introspección para darle sentido a algunas cosas de tu vida cotidiana“ aunque no logremos ni entenderlos ni interpretarlos, pero en el camino nos conocimos mejor.
Hace rato mencionamos que la idea de llevarlos a un cortometraje animado fue perfecta. Durante su proyección en el FICM, la gente soltó carcajadas con Sueños extraterrestres porque al final, “el cine está lleno de capítulos o episodios de sueños“.