LIMA (EFE).— El gobierno de Perú afronta una nueva crisis tras las pesquisas que abrió la Fiscalía contra la presidenta Dina Boluarte y la detención de su hermano Nicanor por un presunto tráfico de influencias, mientras diversos sectores políticos y la ciudadanía exigen que se pronuncie la gobernante.
Dina Boluarte, que no ofrece declaraciones a la prensa desde hace varias semanas, nombró hace unos días como vocero del despacho presidencial al funcionario Fredy Hinojosa, quien señala que su tarea solo comprende la difusión de las actividades oficiales.
Sin embargo, anteayer, tras ser preguntado por la detención del hermano de la gobernante, aseguró que Dina Boluarte “de ninguna manera” se plantea dimitir de la jefatura del Estado.
Casi en simultáneo con estas declaraciones, el Ministerio Público anunció el inicio de diligencias contra la presidenta y el ministro del Interior, Walter Ortiz Acosta, por el supuesto encubrimiento de su hermano Nicanor, al desactivar el grupo policial que apoya a los fiscales anticorrupción horas antes del arresto de su pariente.
Las diligencias se abrieron contra Dina como presunta instigadora del delito contra la administración pública, en las modalidades de encubrimiento personal y abuso de autoridad, por los que se investiga a Ortiz Acosta.
Petición
Tal como piden diversos sectores políticos, medios de prensa y la ciudadanía, los periodistas que asistieron a la rueda de prensa en el Palacio presidencial insistieron en decir a Hinojosa que se espera un comentario directo de la mandataria.
El vocero se limitó a evadir esas consultas y agregó que desde su posición “no le corresponde referirse a aspectos técnicos jurídicos de una defensa legal de la presidenta de la república o de cualquier otro ciudadano”.
Anteayer, la Policía arrestó a Nicanor Boluarte a petición de la fiscalía anticorrupción, que lo investiga por un presunto caso de tráfico de influencias en la designación de prefectos y subprefectos (delegados del Ejecutivo en diferentes regiones nombrados por el gobierno) a cambio de dádivas económicas y de la captación de afiliados al partido del hermano de la gobernante.
La orden de arresto también incluyó al abogado de la mandataria, Mateo Castañeda, quien ya compareció en varias ocasiones junto a ésta.
Destitución
Ayer mismo, el gobierno peruano informó del cese al director general de Gobierno Interior, Jorge Luis Ortiz marreros, por su supuesta vinculación con la detención de Nicanor Boluarte.
El Ministerio del Interior precisó que dispuso la inmediata remoción de Ortiz Marreros anteayer, en un mensaje publicado ayer en la red social X.
Agregó que se ordenó la elaboración de un informe situacional sobre las autoridades políticas designadas a través de esta dirección general, dependiente del Ministerio del Interior.
“Ello, en el marco de una política de integridad institucional y transparencia” en el Ministerio del Interior, precisó.
De acuerdo con la denuncia de la Fiscalía contra Nicanor, el hermano de la jefa de Estado dirigía presuntamente una red de tráfico de influencias en la designación de prefectos y subprefectos (representantes del Ejecutivo en las regiones), así como su permanencia en esos cargos políticos, una responsabilidad que estaba a cargo de Ortiz desde el Ministerio del Interior.
Detención Corrupción
Este viernes, la Policía arrestó a Nicanor Boluarte a petición de la Fiscalía anticorrupción.
Tráfico de influencias
Se le investiga por presunto tráfico de influencias en la designación de prefectos y subprefectos a cambio de dádivas y de la captación de afiliados al partido del hermano de la gobernante.
Abogado
La orden de arresto también incluyó al abogado de la mandataria, Mateo Castañeda.
Investigados
A raíz de la detención de su hermano, la mandataria y el ministro del Interior, Walter Ortiz, son investigados también por la Fiscalía por el supuesto encubrimiento de su pariente.
Esta nota Silencio de Dina sobre el arresto de su hermano apareció primero en Diario de Yucatán.