CIUDAD DE MÉXICO, 1 de febrero de 2025 (EFE).— La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, dijo que cuando su país negocia o platica con otras naciones lo hace “siempre con la frente en alto” y “nunca agacha la cabeza”, luego de que el mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, firmó en la tarde de hoy sábado las órdenes ejecutivas por las que entran en vigencia los advertidos aranceles del 25% para las mercancías de México.
México ante aranceles
“Cuando negociamos con otras naciones, cuando platicamos con otras naciones, siempre con la frente en alto, nunca agachando la cabeza. Somos iguales con toda las naciones del mundo”, apuntó la Presidenta en una gira de trabajo en Estado de México, en el centro del país, sin anunciar por el momento medidas recíprocas.
“Somos uno mismo, gobierno y pueblo. No hay diferencia (…) Eso le da a nuestro país mucha fuerza frente a cualquier adversidad y cualquier problema, porque estamos juntos”, expresó Claudia Sheinbaum.
Asimismo, dijo que “México es un país libre, independiente y soberano y esa es la manera en que defendemos a las y los mexicanos y a nuestra patria”.
Trump firma la orden de los aranceles
En su residencia particular de Mar-a-Lago en Florida, Trump firmó esta tarde las órdenes ejecutivas por las que entran en vigencia los advertidos aranceles del 25 % para las mercancías de México y Canadá (excepto el petróleo canadiense, que tendrá solo un 10%) y del 10% para los de China.
Con ello, hizo realidad una amenaza que anunció repetidamente y que puede desatar una guerra comercial.
La entrada en vigor de los aranceles será a partir de las 00:01 del martes 4 de febrero en horario de Washington (05:01 GMT).
Aranceles, un torpedo comercial
Los aranceles a México y Canadá —países a los que acusa de no controlar su frontera en sus flujos migratorios ni en los de drogas como el fentanilo, además de aprovecharse de un superávit comercial con EE.UU.— suponen un torpedo en la línea de flotación del tratado de libre comercio entre los tres países norteamericanos existente desde hace treinta años.
Poco después de divulgarse la firma de la orden, la Casa Blanca publicó que los aranceles sobre Canadá estarán en vigor “hasta que Canadá coopere con EE.UU. contra los narcotraficantes y en la seguridad fronteriza”. Repitió la acusación contra México, pero fue más lejos.
“Los carteles mexicanos son los líderes mundiales del tráfico de fentanilo, metanfetamina y otras drogas. Estos carteles tiene una alianza con el Gobierno de México y ponen en peligro la seguridad nacional y la salud pública de los Estados Unidos”, dijo.
President Donald Trump is taking decisive action to protect Americans from the fentanyl crisis. Fentanyl is the leading cause of death for Americans ages 18 to 45.
Today’s tariff announcement is necessary to hold China, Mexico, and Canada accountable for their promises to halt… pic.twitter.com/qY9X2wx9CT
— The White House (@WhiteHouse) February 1, 2025
Amenaza de Trump: subir aranceles si hay represalias
Claudia Sheinbaum había asegurado hoy sábado, antes que Trump firmara la orden, que la imposición de aranceles no le preocupa porque “la economía de México está muy fuerte, muy sólida”, pese a que las exportaciones de su país a EE.UU. supusieron en 2023 casi el 30 % del Producto Interno Bruto (PIB) mexicano, según un reporte del Instituto Mexicano de Competitividad (IMCO).
Además, la Presidenta afirmó ayer viernes que su gobierno tiene “un plan a, un plan b y un plan c” para el momento que se concretaran los aranceles, sin aludir esta vez a aranceles de respuesta.
Trump ya ha advertido de que en caso de represalias, elevará los porcentajes de los aranceles.
En tanto, el secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard, dijo hoy sábado, tras una reunión matutina con Claudia Sheinbaum y empresarios, que México se defenderá ante “cualquier arbitrariedad comercial” de Estados Unidos.
Es bueno ver que hay líderes que defienden los intereses de su país y no se rinden ante las amenazas. Sin embargo, es importante que esas palabras se traduzcan en acciones concretas y efectivas. Hablar de frente es fácil, pero lo que realmente cuenta es cómo se manejan las negociaciones para proteger lo que los mexicanos necesitan.