18 AGOSTO 2025- Benito Juárez, Q. Roo.— La Fiscalía General del Estado (FGE) informó sobre la detención de Víctor Alfonso “N”, señalado como uno de los presuntos responsables de un caso de secuestro exprés ocurrido en junio de 2023 en Othón P. Blanco. La captura se realizó en el municipio de Matamoros, Coahuila, con apoyo de la Fiscalía de esa entidad, y posteriormente el detenido fue trasladado a Quintana Roo para enfrentar a la justicia.
De acuerdo con las investigaciones, la víctima fue interceptada afuera de su domicilio en la calle Tecnológico de Veracruz. Cuando descendía de su vehículo, varios sujetos lo abordaron violentamente; uno de ellos portaba un arma de fuego. Tras intentar escapar, el afectado fue alcanzado y sometido por los agresores, quienes lo trasladaron a un inmueble donde fue golpeado y atado de las manos. La investigación señala a Víctor Alfonso “N” como la persona encargada de rentar dicho inmueble, usado como casa de cautiverio.
Modus operandi del secuestro exprés
El caso muestra la forma en que operaban los responsables: primero llevaron a la víctima a un domicilio en la colonia Proterritorio, donde fue golpeado, y posteriormente lo trasladaron a otra vivienda donde continuaron las agresiones. Durante su retención, los sujetos lo despojaron de sus pertenencias, incluido su teléfono celular, y amenazaron a su familia para exigir 500 mil pesos a cambio de su liberación. La suma fue entregada en dos partes, lo que finalmente permitió que la víctima quedara en libertad.
Este tipo de secuestro exprés refleja la violencia extrema a la que se ven sometidas las víctimas. En este caso, las investigaciones apuntan a que el delito fue planeado con antelación, pues los agresores actuaron en coordinación y con armas de alto calibre. La víctima, tras ser liberada en la calle Juan de Dios Peza, logró regresar por sus propios medios a su hogar, pero las secuelas psicológicas de este tipo de delitos suelen ser profundas y duraderas.
Retos en el combate al secuestro exprés
Si bien la detención de Víctor Alfonso “N” representa un avance importante, expertos en seguridad subrayan que Quintana Roo necesita fortalecer las estrategias de prevención. A pesar de que los casos de secuestro en la entidad no son tan numerosos como en otras regiones, cada evento genera un impacto negativo en la percepción de seguridad y en la confianza ciudadana. Además, el uso de casas de seguridad dentro de zonas urbanas muestra la necesidad de reforzar la vigilancia y los controles sobre inmuebles rentados.
Un valor agregado de este caso es que la FGE informó sobre la coordinación interinstitucional que permitió la captura, un ejemplo de cómo la cooperación entre entidades puede dar resultados positivos en el combate al crimen. Sin embargo, organizaciones civiles advierten que aún falta un mayor apoyo a las víctimas de secuestro y sus familias, tanto en asistencia psicológica como en asesoría legal, para lograr una verdadera justicia integral y evitar que estos delitos queden impunes.
