El Ministerio de Exteriores de Rusia negó este viernes negociaciones con Azerbaiyán y Kazajistán sobre una versión común del siniestro del avión de las Aerolíneas de Azerbaiyán (AZAL) el pasado día 25 en el que murieron 38 personas.
Según Moscú, actualmente en internet se difunde información sobre tales negociaciones, presuntamente, llevadas a cabo por un funcionario de alto rango de Exteriores ruso.
“No hubo negociaciones sobre ese tema con los departamentos de política exterior de esos países”, insistió la diplomacia rusa.
De acuerdo con Exteriores ruso, “detrás de esta desinformación maliciosa hay un encargo político”.
Previamente, AZAL informó en un comunicado de que su avión, siniestrado en Aktau (Kazajistán) tras no poder aterrizar en la ciudad rusa de Grozni, sufrió “interferencias físicas y técnicas externas”.
En un comunicado en las redes, AZAL indicó que así lo indican “los resultados preliminares” de la investigación sobre el “accidente del avión Embraer 190 de Azerbaiyán Airlines, que realizaba el vuelo Bakú-Grozni número J2-8243”.
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La autoridad aeronáutica rusa reconoció hoy que drones ucranianos perpetraron un ataque contra dos ciudades de Cáucaso Norte, entre ellas Grozni, lo que llevó a la aplicación de un “plan de contingencia” en la zona que coincidió con el vuelo del avión de las Aerolíneas de Azerbaiyán (AZAL).
Mientras prosiguen las investigaciones sobre el siniestro, los representantes del fabricante de aviones brasileño Embraer han llegado a Aktau, lugar donde se estrelló el avión, informó la agencia de noticias Kazinform.
El avión de AZAL se estrelló el miércoles en las cercanías del aeropuerto kazajo de Aktau, barajándose en un inicio las versiones del choque contra una bandada de pájaros o la explosión de un tanque de oxígeno.
Sin embargo, pocas horas después del siniestro, en las redes sociales comenzaron a circular vídeos que mostraban marcas parecidas al impacto de la metralla de un misil antiaéreo en el fuselaje del avión.
Las autoridades kazajas de momento han evitado pronunciarse a favor de una versión definitiva y solo confirmaron la explosión del balón de oxígeno mientras continúan las investigaciones.
En tanto, fuentes del Gobierno azerbaiyano responsabilizaron a Moscú del siniestro y aseguraron que Bakú queda a la espera del reconocimiento ruso.
Con información de EFE
