
10 de Noviembre del 2025.- Un avance científico de la Universidad de Nottingham, en Reino Unido, podría cambiar la odontología para siempre, ofreciendo una solución real a las caries y al desgaste. En colaboración con un equipo internacional, los científicos han desarrollado un gel revolucionario que promete reparar y regenerar el esmalte dental perdido. Este logro, hasta ahora considerado biológicamente imposible, podría poner fin a los métodos tradicionales que solo tapan el problema, en lugar de solucionarlo desde la raíz.
El innovador gel no contiene flúor y su secreto radica en una composición basada en proteínas. Funciona imitando las proteínas naturales que nuestro cuerpo utiliza durante la infancia para guiar el crecimiento del esmalte. Su aplicación es sencilla, muy similar a los tratamientos de flúor que se usan habitualmente en el dentista, pero sus resultados van mucho más allá de una simple capa de protección superficial, iniciando una verdadera reparación del diente.
Cómo Funciona el Gel
Cuando el gel se aplica sobre el diente, crea una capa fina que inmediatamente llena pequeñas grietas y huecos, iniciando el proceso de mineralización. Actúa como un andamiaje biológico que tiene la capacidad de atraer iones de calcio y fosfato, los cuales están presentes de forma natural en nuestra saliva. Esto promueve un crecimiento controlado de nuevo mineral a través de un proceso técnico llamado mineralización epitaxial, donde el nuevo material crece ordenadamente sobre el antiguo.
La dificultad para reparar el esmalte dental radica en que es un tejido acelular; es decir, no tiene células vivas que puedan repararlo como sí ocurre con la piel o los huesos. El gel supera este obstáculo al imitar la función de las amelogeninas, las proteínas clave responsables de formar la estructura cristalina del esmolte durante la dentición. Básicamente, el gel crea el molde perfecto para que los minerales de la saliva reconstruyan el tejido dañado de forma organizada.
Los beneficios de este tratamiento para el esmalte dental no se detienen en la superficie visible. Los científicos señalan que el gel también podría aplicarse sobre la dentina expuesta, que es la capa sensible que se encuentra justo debajo del esmalte. Al hacerlo, crearía una nueva capa protectora similar al esmalte, lo que podría tratar eficazmente la hipersensibilidad dental (dientes sensibles) y, además, mejorar la adhesión o el agarre de futuras restauraciones dentales, como las resinas.








