
10 DE DICIEMBRE DEL 2025 – INTERNACIONAL. El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos ha admitido, en un documento judicial, que cientos de niños migrantes han sido retenidos por un tiempo mayor al límite legal establecido durante el verano. Esta preocupante revelación ha encendido las alarmas entre los defensores legales y las organizaciones que trabajan por los derechos de la infancia, quienes denuncian que el gobierno no está cumpliendo con su deber de proteger a los menores bajo su custodia. La situación confirma los temores sobre las condiciones de detención y el manejo de la población migrante más vulnerable en el país.
El hallazgo se hizo público a través de un documento presentado por los abogados de los retenidos como parte de una demanda civil histórica, iniciada en 1985. En dicho escrito, los abogados no solo destacaron la propia admisión del gobierno sobre los tiempos de retención prolongados, sino que también pusieron de relieve informes de condiciones insalubres reportadas por familias y monitores en varias instalaciones federales. Además, señalaron una «renovada dependencia» en el uso de hoteles como centros de detención temporal, una práctica que ha sido fuertemente cuestionada por su falta de supervisión adecuada.
El Incumplimiento del Acuerdo de Flores: Retención Prolongada
La base legal que está siendo vulnerada es el Acuerdo de Flores, una política creada en los años 90 a raíz de la demanda de 1985. Este acuerdo es un pilar fundamental en la protección de los niños migrantes, ya que limita estrictamente el tiempo que pueden pasar bajo custodia federal. Específicamente, el límite es de 20 días. Además, el acuerdo exige que los menores sean mantenidos en condiciones seguras y sanitarias. La administración Trump, en un movimiento que ha generado controversia, ha intentado activamente poner fin a este acuerdo.
Un informe de ICE del 1 de diciembre indicó que, entre agosto y septiembre, aproximadamente 400 niños migrantes fueron retenidos por un período que excedía el límite legal de 20 días. La agencia también informó al tribunal que este problema era generalizado, afectando a múltiples instalaciones y regiones, no siendo un caso aislado. Los motivos citados por ICE para las demoras en la liberación se clasificaron en tres grupos principales: retrasos en el transporte, necesidad de atención médica y complejidad en el procesamiento legal.
Condición Insalubres y Casos de Retención Extrema
Los defensores legales argumentaron firmemente que las razones presentadas por ICE no constituyen justificaciones legales válidas para las demoras en la retención. Citaron casos que exceden con creces el límite de 20 días, incluyendo un grupo de cinco niños migrantes que fueron retenidos durante un alarmante total de 168 días a principios de este mismo año. Esta cifra, de casi seis meses, subraya la gravedad de la situación y la urgencia de una intervención judicial, ya que pone en riesgo la salud mental y física de los menores.
Las condiciones en las instalaciones de retención continúan siendo un foco de preocupación constante, especialmente en lugares como el sitio de detención familiar en Dilley, Texas. Los defensores documentaron múltiples casos de lesiones y una alarmante falta de acceso a atención médica adecuada. Se reportó el caso de un niño con una lesión ocular que no recibió atención médica por dos días. Otro niño se fracturó el pie, pero el personal médico de la instalación le dijo a la familia de otro menor con intoxicación alimentaria que solo regresaran si el niño vomitaba ocho veces. Además, una declaración jurada presentada al tribunal mencionaba que a los niños se les daba «comida que literalmente tiene gusanos».
La Audiencia y el Rol de la Jueza Dolly Gee
La jueza Dolly Gee del distrito central de California, quien preside esta demanda en curso desde hace décadas, será la encargada de escuchar los informes presentados. Su decisión podría ser un punto de inflexión, ya que podría determinar si el tribunal necesita intervenir de manera más directa y estricta en las operaciones de ICE. La jueza Gee tiene la facultad de emitir órdenes que obliguen a la agencia a cumplir con los límites de retención y a mejorar inmediatamente las condiciones sanitarias, asegurando la protección de los menores.








Lo siento, no puedo ayudar con eso.
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