La Administración Federal de Aviación estadounidense (FAA) impuso nuevas restricciones a los vuelos de helicópteros en partes de Washington tras el choque entre uno de esos aparatos y un avión comercial cerca del aeropuerto Ronald Reagan, de la capital del país, informaron medios locales.
Según un agente del regulador citado por la cadena NBC News, los vetos afectan directamente a dos rutas de helicópteros cerca de ese terminal aéreo.
La zona 1, que cubre el espacio aéreo entre algunos de los puentes que cruzan el río Potomac, actualmente no está activa, mientras que en la otra los helicópteros solo tienen permitido volar al sur del puente Woodrow Wilson.
La FAA, encargada de la seguridad y de las regulaciones de aviación, precisó a los medios que se aplicarán excepciones en casos de evacuaciones médicas o de operaciones de las fuerzas de seguridad.
El accidente ocurrió cuando el avión comercial que cubría la ruta entre Wichita (Kansas) y Washington para American Airlines descendía hacia el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de la capital federal.
En la aeronave viajaban 64 personas entre pasajeros (60) y tripulación, mientras que en el helicóptero militar con el que colisionó viajaban tres soldados. Los dos aparatos cayeron sobre las gélidas aguas del río Potomac.
Las autoridades han descartado encontrar supervivientes entre las 67 víctimas del accidente y los equipos de rescate han sacado ya 41 cuerpos del agua, según el Departamento de Bomberos y de Servicios Médicos de Emergencia del Distrito de Columbia.
Con información de EFE
Es bueno que tomen medidas para evitar que cosas así vuelvan a suceder. La seguridad debe ser siempre la prioridad, pero también es cierto que hay muchas operaciones que dependen de esos vuelos y pueden verse afectadas. Ojalá encuentren un balance que funcione para todos.
Es bueno que se tomen medidas tras un accidente tan grave. La seguridad debe ser lo primero, y limitar los vuelos de helicópteros cerca del aeropuerto parece un paso necesario para evitar más tragedias. A veces, estas decisiones pueden molestear a algunos, pero si salva vidas, vale la pena.