17 JULIO 2025- INTERNACIONAL- El Gobierno de Reino Unido ha anunciado nuevas sanciones dirigidas a tres unidades del servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas de Rusia (GRU), así como a 18 espías rusos señalados por realizar actividades cibernéticas maliciosas. Esta medida forma parte de una respuesta coordinada con aliados occidentales para frenar los constantes ataques digitales provenientes del Kremlin, que amenazan la infraestructura crítica de múltiples países.
Según las autoridades británicas, los sancionados estarían directamente relacionados con ciberataques contra instituciones públicas, sistemas electorales y redes de comunicación, incluyendo campañas de desinformación y sabotaje digital. Este tipo de acciones han incrementado la preocupación por la seguridad cibernética global, especialmente en un contexto geopolítico marcado por la guerra en Ucrania y el aumento de tensiones entre Moscú y Occidente.
El Gobierno británico ha señalado que los espías actuaron bajo órdenes del Kremlin y que sus actividades forman parte de una estrategia de guerra híbrida que combina acciones militares, tecnológicas y de manipulación informativa. Las sanciones incluyen la congelación de activos y prohibiciones de viaje, en un intento de frenar su capacidad operativa.
Esta ofensiva diplomática se produce tras el hallazgo de múltiples intentos de infiltración digital a través de plataformas gubernamentales y servicios financieros del Reino Unido. El Ministerio de Relaciones Exteriores indicó que los ataques forman parte de un patrón persistente y cada vez más sofisticado, lo que refuerza la necesidad de colaboración internacional para contrarrestar las amenazas cibernéticas.
