
MIAMI.- La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) expresó su preocupación por una reforma legal en Puebla, México, que criminaliza con hasta tres años de cárcel el “ciberasedio”, lo que podría derivar en censura encubierta y castigar críticas incómodas.
Advirtió que se limitaría gravemente la libertad de expresión en entornos digitales con la reforma al Código Penal de Puebla, el quinto estado más poblado de México con más de 6.5 millones de habitantes.
Nueva ley castiga el “ciberasedio” en Puebla
La medida, ya vigente, crea el delito de “ciberasedio” para quien, a través de la utilización de tecnologías de la información y la comunicación, redes sociales, correo electrónico o cualquier espacio digital “insulte, injurie, ofenda, agravie o veje a otra persona con la insistencia necesaria para causarle un daño”.
Además, autoriza a empresas y plataformas a eliminar contenidos tras una simple solicitud, sin intervención judicial ni revisión independiente.
“Esto creará una vía rápida para censurar crítica legítima, testimonios incómodos o investigaciones periodísticas”, según críticos de la reforma citados por la SIP.
“Lo que está en juego es el derecho de toda la sociedad a informarse y debatir. Esta iniciativa puede borrar del espacio público información incómoda, dañando la memoria colectiva y la rendición de cuentas”, indicó José Roberto Dutriz, presidente de la SIP.
Polémica ley del gobierno de Morena en Puebla
Ante la controversia, el gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, de Morena, prometió realizar foros para revisar la medida, pero la presidenta del Congreso local, Laura Artemisa, del mismo partido, avisó a los medios que no derogará la reforma.
La iniciativa causa preocupación en México, que en 2024 fue el país de Latinoamérica en el que asesinaron más periodistas (5) y desde hace años es una de los 10 naciones más peligrosas para el sector, según el último informe del Comité de Protección para Periodistas (CPJ).
Es preocupante que se busque castigar el ciberasedio, pero hay que tener cuidado, porque a veces estas leyes pueden usarse para silenciar voces críticas. La libertad de expresión es clave y no debería verse afectada por buenas intenciones.