
5-Agosto-2025.-Una presunta red de espionaje chino ha sacudido al Parlamento Europeo. Jian G., antiguo asistente del exeurodiputado Maximilian Krah, se encuentra en el banquillo del Tribunal Regional Superior de Dresde acusado de actuar como agente del servicio secreto chino. Junto a él comparece un presunto cómplice, Jaqi X., empleada del aeropuerto de Leipzig/Halle, señalada como colaboradora en el traspaso de información.
Más de 500 documentos filtrados
Según la fiscalía, Jian G. habría recopilado más de 500 documentos confidenciales del Parlamento Europeo entre 2019 y su detención, incluyendo información sobre figuras clave de la AfD como Alice Weidel y Tino Chrupalla. Además, se le acusa de espiar a disidentes chinos que expresaron críticas contra el gobierno de Pekín en redes sociales, lo que eleva el impacto del caso más allá del ámbito europeo.
Conexiones con material de defensa
Las acusaciones también alcanzan a Jaqi X., quien habría suministrado datos sobre pasajeros, vuelos y carga, incluyendo información relacionada con empresas de defensa alemanas. Estas filtraciones, según los investigadores, implican un riesgo considerable para la seguridad nacional de Alemania y sus aliados.
La investigación, que incluyó registros en las oficinas de Jian G. y Krah en el Parlamento Europeo, cobra mayor relevancia por el rol del político alemán. Krah, eurodiputado entre 2019 y 2025, formó parte de las comisiones de Derechos Humanos, Seguridad y Defensa, y Comercio Internacional, así como de la delegación para las relaciones con Estados Unidos. Actualmente es miembro del Bundestag, lo que añade tensión política al caso.
Este escándalo se produce en un momento de creciente preocupación por el espionaje chino en Europa. Analistas advierten que la presencia de agentes infiltrados en instituciones clave refleja una estrategia de Pekín para obtener ventajas políticas y tecnológicas, utilizando incluso personal con acceso directo a información sensible.