30 de Diciembre del 2025.- Un tribunal en la ciudad de Ranchi, ubicada en el estado indio de Jharkhand, tomó una decisión que ha dejado bopebiertos a los ciudadanos. El juez encargado del proceso decidió absolver al principal sospechoso de un caso de tráfico de drogas luego de que las autoridades presentaran una excusa difícil de creer. Según los oficiales de policía, casi 200 kilos de marihuana incautada desaparecieron por completo del depósito de pruebas tras ser devorados por una plaga de ratas.
La investigación original se remonta a enero del año 2022, cuando agentes de la comisaría de Ormanjhi detuvieron un vehículo durante un control rutinario. En aquel operativo, se encontró un cargamento masivo de hierba ilegal que supuestamente viajaba con destino a la localidad de Ramgarh. Durante la intervención, fue arrestado un hombre llamado Indrajit Rai, mientras que sus acompañantes lograron huir de la escena, dejando atrás el cargamento valorado en miles de dólares.
El detenido fue procesado bajo las estrictas leyes de sustancias psicotrópicas que rigen en la India, las cuales prohíben estrictamente la posesión y el comercio de cannabis confiscado. Sin embargo, a medida que el juicio avanzaba, las pruebas fundamentales comenzaron a desvanecerse, literalmente. El golpe definitivo para la fiscalía ocurrió cuando se reveló que la evidencia física necesaria para condenar al acusado ya no existía debido a la supuesta invasión de los roedores en el almacén policial.
La grave negligencia de las autoridades policiales
El tribunal no tomó a la ligera la explicación de los oficiales y calificó el incidente como un acto de «grave negligencia» por parte de la institución. Los jueces señalaron que es responsabilidad directa de la policía garantizar que la marihuana incautada se mantenga bajo estricta vigilancia y en condiciones que aseguren su integridad para el juicio. La incapacidad de proteger este material no solo permitió que el culpable saliera libre, sino que puso en duda la seriedad de todo el sistema de justicia local.
Además de la desaparición de la droga, el caso presentaba múltiples fallas técnicas y testimonios contradictorios sobre cómo se realizó el operativo inicial. Los abogados defensores aprovecharon que no existía rastro del cannabis confiscado para argumentar que no había una conexión real entre su cliente y el cargamento. Al no haber muestras físicas que analizar o presentar ante la corte, el vínculo legal entre el sospechoso y el delito se rompió irremediablemente durante las audiencias.
