
18-Septiembre-2025.-.El ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radoslaw Sikorski, sugirió que los países miembros de la OTAN deberían considerar la imposición de una zona de exclusión aérea sobre Ucrania, con el objetivo de proteger tanto a la población como al territorio de la alianza frente a la amenaza de drones rusos.
La declaración surge después de que varios drones rusos violaran el espacio aéreo polaco la semana pasada, lo que obligó a cazas y sistemas de defensa aérea de la OTAN a interceptarlos y derribarlos. El incidente se prolongó durante siete horas y movilizó a fuerzas de Polonia, Holanda, Italia, Alemania y la propia OTAN.
Aunque los drones no estaban armados, uno de ellos impactó en una vivienda en la localidad de Wyryki, causando daños materiales. “La protección para nuestra población sería mayor si pudiéramos combatir drones y otros objetos voladores más allá de nuestro territorio nacional”, afirmó Sikorski en entrevista con el diario alemán Frankfurter Allgemeine.
El canciller polaco añadió que, si Ucrania solicitara que los aliados derribaran drones en su espacio aéreo, la medida también beneficiaría a la seguridad de los estados fronterizos de la OTAN. “Si me preguntan a mí personalmente, deberíamos considerarlo”, subrayó.
La idea de establecer una zona de exclusión aérea sobre Ucrania no es nueva. Ya en 2022, el presidente Volodymyr Zelensky la propuso tras la invasión rusa a gran escala, pero fue rechazada por los aliados por temor a un enfrentamiento directo con las fuerzas aéreas de Moscú. En esta ocasión, la propuesta de Polonia se enfocaría únicamente en interceptar drones que ponen en riesgo a los países vecinos de la OTAN.
El Ministerio del Interior polaco reportó que tras el ataque se localizaron al menos 16 drones en diversas zonas del país. Por su parte, Rusia negó haber tenido como objetivo a Polonia, asegurando que sus drones no tienen capacidad de vuelo para alcanzar ese territorio.
La tensión no se limitó a Polonia. Rumanía también confirmó la incursión de un dron ruso en su espacio aéreo apenas días después, lo que encendió nuevamente las alarmas en el flanco oriental de la OTAN.