CIUDAD DE MÉXICO.—Tres mercados en México vuelven a figurar en la lista negra del comercio internacional: Tepito, en Ciudad de México, y San Juan de Dios y El Santuario, ambos en Guadalajara, Jalisco, fueron señalados por la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR) en su lista anual de “Mercados Notorios por Falsificación y Piratería” correspondiente a 2024.
El informe identifica 38 mercados físicos y digitales en todo el mundo que facilitan o se benefician de la piratería, causando graves daños a los derechos de propiedad intelectual (PI) y afectando el comercio legítimo.
Tepito y San Juan de Dios son recurrentes en esta lista, mientras que El Santuario aparece por primera vez.
El “barrio bravo” en México
Al igual que en años anteriores, el USTR destaca que Tepito, ubicado en la alcaldía Cuauhtémoc, sigue siendo uno de los principales centros de distribución de mercancía pirata en México y Centroamérica.
Este mercado, conocido por su peligrosidad, opera bajo el control del crimen organizado, lo que dificulta cualquier intento de proteger los derechos de PI.
Jalisco bajo la lupa
Por su parte, la actividad ilegal en San Juan de Dios, el mercado techado más grande de América Latina administrado por el gobierno de Guadalajara, se realiza de manera abierta.
Con un aproximado de tres mil puestos que venden piratería, las autoridades no han adoptado medidas concretas para erradicar estas prácticas.
Medicinas apócrifas
Lo más preocupante del informe de este año es la mención de la piratería farmacéutica como un enfoque clave. Esta práctica no solo representa un riesgo económico, sino también un grave peligro a la salud pública.
Los medicamentos falsificados pueden contener ingredientes peligrosos, carecer de principios activos o ser ineficaces, poniendo en riesgo la vida de la gente.
En este contexto, El Santuario se perfila como un caso alarmante. Según el informe, este barrio de Guadalajara es un punto clave para la venta y distribución de medicamentos falsificados, robados y caducados.
Tanto la venta minorista como la distribución mayorista de estos productos generan pérdidas millonarias a empresas legítimas y ponen en peligro a la población.
Lo más inquietante es que estas actividades se realizan abiertamente, sin que las autoridades tomen medidas significativas para asegurar los productos o procesar a los responsables.
A pesar de las acciones recientes de las autoridades mexicanas, como los operativos realizados en la Plaza Izazaga 89 en la Ciudad de México, el 28 de noviembre de 2024, y en Hermosillo, Sonora, el 12 de diciembre de 2024, el informe del USTR no reconoce avances significativos en el combate a la piratería en el país.
En contraste, Vietnam fue elogiado por desmantelar una de las mayores redes de piratería del mundo y lograr condenas penales por violación a derechos de autor.
Argentina, Brasil, Filipinas y Kuwait también son reconocidos por llevar a cabo operativos, así como por campañas de concientización y capacitación de las fuerzas del orden en materia de propiedad intelectual.
Pérdidas económicas
Según la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), la piratería y el contrabando representan el 1.25% del Producto Interno Bruto (PIB).
La piratería ha afectado de forma grave a la industria textil mexicana, con pérdidas de más de 70,000 empleos debido a la competencia desleal de las mercancías ilegales.