
Dos pilotos de Ethiopian Airlines protagonizaron un insólito incidente el 15 de agosto de 2022, cuando se quedaron dormidos en pleno vuelo a 37.000 pies de altura mientras operaban un Boeing 747 que cubría la ruta entre Jartum, Sudán, y Adís Abeba, Etiopía. El hecho, que fue reportado por el portal especializado Aviation Herald, ocurrió minutos antes del descenso al aeropuerto etíope.
Según el informe, los pilotos no realizaron las maniobras de aterrizaje y la aeronave continuó volando automáticamente siguiendo la ruta programada por el sistema de gestión de vuelo. El control aéreo intentó comunicarse sin éxito, hasta que el piloto automático se desconectó y la alarma en cabina despertó a la tripulación.
Tras recuperar el control manual, los aviadores lograron aterrizar de manera segura en un segundo intento, unos 25 minutos después de haber sobrepasado la pista. La compañía aérea suspendió de inmediato a los pilotos mientras se llevaba a cabo una investigación interna sobre el insólito suceso.
Aunque no hubo víctimas ni daños materiales, el incidente reabrió el debate sobre la fatiga en la aviación comercial y las extensas jornadas laborales que enfrentan los pilotos. Expertos señalaron que el cansancio extremo puede afectar la concentración, el tiempo de reacción y la capacidad de decisión en vuelo.
En la industria aérea, los descansos durante vuelos largos son habituales, pero están regulados y organizados por turnos. Sin embargo, en este caso, el sueño no autorizado de ambos tripulantes puso en riesgo la seguridad del vuelo, pese a que el sistema automático evitó una tragedia mayor.








