Millones de católicos en el mundo conmemoraron ayer la muerte del Señor en la cruz con los tradicionales oficios, marchas del silencio, el rosario de pésame a la Virgen y Vía Crucis vivientes, en una jornada de Viernes Santo que se caracterizó por el fuerte calor en varias regiones.
En Jerusalén, cientos de cristianos participaron en la habitual procesión entre los muros de piedra caliza de la Ciudad Vieja, conmemorando uno de los días más sagrados de su fe con multitudes notablemente menores que en años pasados en medio de la guerra entre Israel y Hamás.
En Nicaragua, cientos de católicos celebraron el Vía Crucis en los jardines de la catedral metropolitana de Managua y no en las calles, luego que las autoridades policiales prohibieran toda actividad pública, incluidas las religiosas, sin previa autorización.
En Ecuador, masivas procesiones se sucedieron ayer en varias regiones marcadas por el insistente pedido de los participantes de paz y seguridad en una nación golpeada por el crimen, crisis carcelarias, asaltos, robos, asesinatos y el narco.
En Guatemala, decenas de hombres recorrieron más de dos kilómetros de rodillas, descalzos, con coronas de espinas en la cabeza y con un rosario en las manos, para pedir perdón por sus pecados en un poblado maya k’iche’ del noroeste del país.
En Perú, el “Cristo Cholo”, una tradicional representación peruana de Jesucristo a cargo del actor Mario Valencia, recorrió ayer en la tarde las principales calles del centro histórico de Lima hasta ascender al cerro San Cristóbal, donde se escenificó la crucifixión.
En Panamá, un Jesús vapuleado y ensangrentado fue recreado ante el público congregado en las estrechas calles de Panamá Viejo, en una representación a cargo de un grupo teatral que evangeliza desde hace décadas a través de la cultura, e integrado, entre otros, por jóvenes rescatados de las calles.
En Filipinas, las crucifixión de una decena de personas volvió a ser el “plato fuerte” de la celebración del Viernes Santo, donde la estrella fue Ruben Enaje, un carpintero que rompió su promesa de retirarse y emuló la pasión de Cristo por trigésimo quinta vez.— AP/EFE
España Mal tiempo
Lluvia y frío deslucieron la Semana Santa en distintas partes de España.
Tradiciones cumplidas
En otras regiones no impidieron cumplir con tradiciones seculares.
Suspensiones
Algunas procesiones tuvieron que suspenderse y otros actos del Viernes Santo se limitaron al interior de las iglesias.
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