
MIAMI (EFE).— La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) alertó ayer sobre el impacto en la libertad de prensa en las Américas de las democracias debilitadas y la creciente presión de los gobiernos autoritarios, durante la apertura de su Reunión de Medio Año.
“Desde la censura económica hasta la estigmatización pública, gobiernos autoritarios y democracias debilitadas recurren cada vez más a tácticas represivas para silenciar voces independientes, mientras un discurso público contaminado por la desinformación erosiona la confianza en el periodismo y debilita las bases del debate democrático”, dijo José Roberto Dutriz, presidente de la SIP.
Dutriz destacó las misiones internacionales de la SIP como herramienta clave para visibilizar la situación de la libertad de prensa. En los últimos seis meses, realizaron visitas a Guatemala, Panamá, Costa Rica y Perú.
En Guatemala, mencionó que la firma pública de la Declaración de Chapultepec por el presidente Bernardo Arévalo representó un hito, y resaltó la presencia simbólica de José Rubén Zamora, “quien había estado injustamente privado de libertad por más de 800 días”.
El directivo, sin embargo, lamentó que el periodista ha regresado a la cárcel.
En Panamá, recordó que tanto el presidente José Raúl Mulino como los titulares de la Asamblea Nacional y la Corte Suprema de Justicia firmaron las declaraciones de Chapultepec y Salta II, en un acto que refuerza el compromiso institucional con la libertad de expresión.
“Durante la misión en Panamá pudimos dialogar sobre los desafíos aún persistentes, así como las demandas por difamación y el uso indebido”, precisó.
En contraste, las misiones a Costa Rica y Perú revelaron “retrocesos alarmantes que deben preocuparnos profundamente”. En Costa Rica, advirtió que “el actual presidente, Rodrigo Chaves, ha impulsado un discurso abiertamente hostil hacia la prensa crítica”, incluyendo “campañas de desprestigio, amenazas en redes sociales y la exposición pública de datos personales de periodistas”.
Sobre Perú, Dutriz sostuvo que “constatamos un deterioro estructural de las condiciones para el ejercicio del periodismo independiente”, marcado por el uso del aparato judicial como herramienta de silenciamiento”.
Firme compromiso
Ante el panorama, la SIP dijo que reafirma su compromiso con la denuncia, la observación y la presión internacional para defender la libertad de prensa.
Con la participación de líderes del periodismo del continente y de España, la SIP inauguró ayer su Reunión de Medio Año 2025, que se realiza de forma virtual.
Dutriz destacó también cuales han sido las acciones emprendidas por la organización para apoyar a periodistas en riesgo, incluyendo la creación de nuevas redes y alianzas estratégicas, entre ellas la Red Latinoamericana de Periodismo en el Exilio (Relpex), que “busca accionar como un puente de contención, apoyo y visibilidad para sus problemas”.
“Esta iniciativa no sólo da cuenta de nuestra solidaridad, sino de una nueva dimensión del periodismo regional. Una que se rehace desde el desplazamiento forzado, que sigue investigando, informando y denunciando, aunque lejos de su tierra natal”, expresó.
En esa misma línea, recordó la alianza con la organización Vita Activa para brindar apoyo psicosocial a periodistas desplazados.
“Sabemos que no hay periodismo libre si quienes lo ejercen no tienen las mínimas condiciones humanas y emocionales para hacerlo”, sostuvo. “Proteger a la prensa no solo es una tarea legal o política, también es una tarea humana de cuidado y de acompañamiento”.
Es preocupante que en muchos países de la región la libertad de prensa esté en peligro. La prensa es fundamental para que la gente esté informada y pueda expresar sus opiniones. Sin embargo, parece que en lugar de mejorar, la situación se complica cada vez más. Es triste ver cómo algunos gobiernos no respetan este derecho básico y, en vez de fomentar un debate sano, lo que hacen es silenciar voces. La libertad de prensa no debería ser un lujo, sino algo garantizado para todos.
Es preocupante que la libertad de prensa siga siendo un tema tan complicado en muchos lugares. La información es clave para que la gente pueda tomar decisiones informadas, y cuando los medios no pueden trabajar libremente, todos perdemos. Es hora de que se tomen en serio estos problemas y se busquen soluciones, porque una democracia fuerte necesita una prensa libre.