
Acuerdo histórico entre los 32 países miembros
En una decisión sin precedentes, los 32 países que integran la #OTAN acordaron por unanimidad elevar el gasto militar mínimo obligatorio del 2% al 5% del Producto Interno Bruto (PIB) a partir del año 2035. La medida, que redefine los compromisos defensivos dentro de la alianza, busca fortalecer la capacidad militar colectiva ante un escenario global marcado por tensiones geopolíticas y amenazas híbridas.
Europa se rearma en medio de tensiones crecientes
Este nuevo estándar representa un cambio drástico respecto al pacto anterior, que establecía el 2% como referencia. Muchos miembros ya enfrentaban dificultades para alcanzar esa meta, por lo que la exigencia del 5% ha generado sorpresa, preocupación y debate tanto en gobiernos como en sociedades civiles. Sin embargo, líderes de la OTAN justificaron la medida como una necesidad urgente para garantizar la seguridad regional y global.
De acuerdo con fuentes aliadas, el aumento en el gasto permitirá inversiones masivas en modernización de armamento, desarrollo tecnológico, ciberdefensa, inteligencia artificial y preparación frente a conflictos de gran escala. La decisión también envía un mensaje claro a potencias como Rusia y China, a quienes la OTAN considera desafíos estratégicos crecientes.
Algunos analistas señalan que este acuerdo pudo haber sido impulsado por presiones de figuras clave como Estados Unidos, que desde hace años exige que Europa aumente su compromiso financiero dentro de la alianza. En particular, sectores ligados al expresidente Donald Trump han sido insistentes en que Washington ya no puede seguir cubriendo la mayor parte del presupuesto militar conjunto.
En contraste, movimientos sociales, partidos progresistas y organizaciones humanitarias han expresado su rechazo a este incremento, argumentando que el gasto militar excesivo puede restar fondos a áreas vitales como salud, educación o cambio climático. También advierten sobre una posible carrera armamentista global sin una estrategia de paz clara.
Pese a las voces críticas, los países de la OTAN acordaron establecer un plan escalonado para alcanzar la meta del 5% de aquí a 2035, con revisiones anuales para evaluar avances. El acuerdo marca el inicio de una nueva etapa para la alianza atlántica, con un modelo de defensa mucho más ambicioso y costoso que el que conocíamos hasta ahora.
La noticia parece interesante, pero creo que le falta un poco más de profundidad. A veces se siente que solo rascan la superficie y no explican bien el contexto. Sería bueno que dieran más detalles para que todos podamos entender mejor lo que está pasando.