2 SEPTIEMBRE 2025- INTERNACIONAL-El presidente Donald Trump anunció que las fuerzas armadas de Estados Unidos han hundido una embarcación cargada de drogas en el Caribe, la cual, según sus declaraciones, provenía de Venezuela. «Acabamos de disparar a un barco que transportaba drogas. Sucedió hace solo unos momentos. Tenemos muchas drogas entrando a nuestro país, y estas vinieron desde Venezuela», afirmó Trump ante la prensa. Este operativo, que ha sido calificado por el secretario de Estado, Marco Rubio, como un «ataque letal», se dirige contra una organización que las autoridades estadounidenses han designado como una amenaza narcoterrorista, lo que intensifica aún más las tensiones entre Washington y Caracas.
El anuncio del operativo se produce en un contexto de creciente hostilidad entre ambos países. La administración Trump ha acusado públicamente a Nicolás Maduro de liderar una red de narcotráfico, lo que llevó al despliegue de buques de guerra estadounidenses en el Caribe. Por su parte, el gobierno venezolano ha decretado un estado de «máxima preparación» para defenderse de lo que consideran amenazas militares. Si bien las autoridades estadounidenses no han anunciado planes de invasión, la acción naval en el Caribe deja claro que la Casa Blanca está dispuesta a utilizar la fuerza para combatir el tráfico de drogas que, según sus reportes, se origina en territorio venezolano.
La intercepción de esta embarcación es una muestra de la estrategia de la administración Trump para ejercer presión sobre el régimen de Maduro. Al enfocarse en las actividades ilícitas como el narcotráfico, Estados Unidos busca asfixiar financieramente a Caracas y debilitar el poder de su actual gobierno. Sin embargo, estas acciones también aumentan el riesgo de una escalada militar en la región, un escenario que preocupa a la comunidad internacional.
Desacuerdo con Putin y el eje Rusia-China
En el mismo discurso, el presidente Trump expresó su «decepción» con el presidente ruso Vladimir Putin tras la cumbre que sostuvieron en Alaska. A pesar de haber mantenido una «gran relación», Trump no especificó qué medidas podría tomar contra Rusia. Este comentario contrasta con la cumbre reciente de Putin en Beijing, donde se reunió con su homólogo chino, Xi Jinping, en un evento que muchos analistas consideran una consolidación del eje Rusia-China. Sin embargo, Trump minimizó esta preocupación, asegurando que no le inquieta la posibilidad de que ambos países unan sus fuerzas, ya que Estados Unidos posee el ejército más poderoso del mundo.
La postura de Putin desde China parece más conciliadora. El presidente ruso declaró que la administración estadounidense está «escuchando» las justificaciones rusas para la invasión de Ucrania y expresó su expectativa de que el diálogo con Estados Unidos continúe de manera constructiva. Este aparente «entendimiento mutuo» entre ambos gobiernos es una señal de que las conversaciones diplomáticas podrían seguir su curso, a pesar de la falta de acuerdos concretos en la cumbre de Alaska y la presión de Ucrania para participar en las negociaciones. Moscú y Washington han planificado una nueva ronda de contactos a nivel ministerial para abordar el conflicto, lo que podría aliviar las tensiones globales.
La diplomacia frente a la confrontación
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